En el partido por el tercer puesto del Mundial de La Haya, Los Leones vencieron 2-0 a Inglaterra. De esta manera, consiguieron meterse por primera vez en el podio de este certamen tras una semana histórica en la etapa de grupos. Matías Paredes, con una ráfaga, fue el autor de los goles en el complemento.
El partido comenzó de manera equilibrada. Ninguno de los dos equipos pudo dominar la bocha y lograr que su rival se repliege. Sin embargo, entre las acciones parejas, Argentina fue mejor. Sus ataques tuvieron más profundidad y sus remates inquietaron al arquero Pinner. Las jugadas más claras llegaron cerca del descanso. Los Leones tuvieron un córner corto a los 31 minutos y Gonzalo Peillat remató fortísimo para seguir con su racha goleadora. Pero al arquero inglés estuvo atento y tapó la chance argentina. Luego, en la última acción de la primer parte, Ashley Jackson disparó tras un córner corto pero Lucas Rey evitó el gol rival. Así se fueron al descanso 0-0.
En el complemento, los ingleses arrancaron mejor. Si bien el partido seguía equilibrado, los primeros 15′ fueron favorables a los europeos. A partir de la misma, Inglaterra se fue acercando al arco que protegió Juan Manuel Vivaldi. El arquero argentino tapó las acciones de riesgo que tuvieron los rivales y, con ésto, la albiceleste creció.
En un parpadeo, Argentina se colocaría arriba en el marcador, no por uno, sino por dos goles, ambos autoría de Matías Paredes. El primero llegó por una gran asistencia desde la izquierda de Lucas Rey. Paredes recibió, eludió al arquero inglés y definió cruzado. Para estirar la diferencia, volvió a recepcionar un pase de Lucas Rey y remató para desatar la locura.
En los últimos diez minutos, Los Leones demostraron por qué se merecen el apodo. Tuvieron una defensa sólida y aguantaron con nervios de acero los embates del rival. Inglaterra llegó a jugar con 11 jugadores de campo y sin arquero, pero aún así la marca albiceleste fue mejor. Y cuando los oponentes superaron a la última línea, Vivaldi se lució para mantener el 2-0. Finalmente, sonó la chicharra y el festejo inició en el Kyocera Stadium.
Los Leones han tenido una nueva jornada histórica para el hockey argentino. Por primera vez, la Selección Mayor Masculina ha conseguido un podio en mundiales. Superaron todas las adversidades y, con un gran juego, se retiran de Holanda con la medalla de bronce. Por eso la emoción de los jugadores y del cuerpo técnico tras el pitido final. Carlos Retegui y sus hombres han escrito una página dorada en el deporte argentino. ¡Salud Leones!
