El básquet 3×3 argentino cerró su excelente actuación en los Juegos Olímpicos de la Juventud en Nanjing con la medalla de bronce. En las semifinales el equipo cayó ante Francia 16-14 y luego superó 17-14 a Rusia en el tercer puesto. El equipo terminó con un récord de diez victorias y tres derrotas.
Luego de hacer un excelente torneo en los Juegos Olímpicos de la Juventud en Nanjing, Argentina cerró el certamen con la medalla de bronce. El equipo integrado por José Vildoza, Michel Divoy, Juan Pablo Lugrín y Rodrigo Gerhardt, dirigidos por Marcelo Germanetto, se quedó con el tercer puesto tras caer en las semifinales ante Francia y recuperarse en el duelo por dicha posición ante Rusia.
Primero el equipo argentino cayó 16-14 ante Francia en la semifinal. El partido fue parejo en todo momento y ningún equipo pudo imponerse claramente en defensa o ataque. Ambos anotaron en dos ocasiones desde larga distancia y Argentina anotó solo una vez más cerca del aro. La diferencia pasó por la profundidad a la hora de atacar. Los europeos penetraron constamente y forzaron ocho faltas que les dieron tiros libres. Desde la línea, Les Bleus anotaron en cinco de sus ocho ocasiones mientras que Argentina lo hizo en dos de tres para que los franceses avancen a la final. José Vildoza fue quien más puntos hizo con 9 mientras que Michel Divoy aportó 4 y Rodrigo Gerhardt 1. Juan Pablo Lugrín no pudo anotar en sus siete minutos en cancha.
Tras la caída, el conjunto dirigido por Marcelo Germanetto superó 17-14 a Rusia para quedarse con el bronce. Al igual que ante los franceses, el partido fue muy parejo en su desarrollo pero Argentina estuvo apenas más preciso que su rival. Los sudamericanos anotaron en cuatro oportunidades desde lejos mientras que sus oponentes lo realizaron en tres, ambos en dieciseis intentos. A su vez Argentina se impuso en la línea de tiros libres ya que anotó en dos de sus tres tiros mientras que Rusia falló los dos que tuvo. José Vildoza fue el máximo anotador con 9 mientras que lo siguieron Michel Divoy con 4 y Juan Pablo Lugrín y Rodrigo Gerhardt con 2.
De esta manera, tras la chicharra final, los chicos festejaron porque se consiguió un gran resultado en este certamen multideportivo. Además de haberse metido en el podio, los chicos argentinos dominaron a los rivales más flojos y cayeron por un margen diminuto ante las grandes potencias. El récord final termina siendo de diez victorias y tres derrotas.
