El equipo femenino venció en la final a Brasil y obtuvo la medalla de oro. Los chicos, en tanto, ganaron la presea de plata.
Una jornada de oro fue la vivida el viernes en las arenas del Cenard por el Centro Sur juvenil de beach handball. Sin importar del color que fuere, Argentina, con la conducción técnica de Leticia Brunati, ganó dos medallas, ya que las chicas fueron doradas y los chicos plateados.
El recorrido del combinado masculino se inició con un 2 a 0 sobre Uruguay (11-10 y 18-10) y ante Paraguay (20-10 y 18-13). Por la fecha tres, que determinaba la ubicación de la zona para su posterior llave de semifinales, los chicos doblegaron a Brasil por 2 a 1 (12-14, 15-8 y 11-10 en shoot-out).
De esa manera, quedaban definidos los cruces. El mismo determinó que Argentina debía ir versus Paraguay para ir por el pasaje al mundial de la categoría. Y el resultado le terminó siendo favorable por 2-0 (22-12 y 20-12) para desatar la locura albiceleste.
En la final se volvieron a topar ante Brasil (que barrió 2-0 a Uruguay) y esta vez la verdeamarelha se tomó revancha y conquistó la medalla de oro producto de un electrizante 2 a 0 (20-19 y 14-12).
Las chicas comenzaron con un andar similar al de los chicos. Las dos primeras fechas las encontró con dos triunfos por el mismo marcador (2 a 0). Uno fue ante Uruguay (18-10 y 19-12) y el otro sobre Chile (20-9 y 22-5).
Sin embargo, en la tarde del jueves sufrieron un tropezón ante Paraguay por 2 a 1 (19-12, 12-18 y 6-7 en shoot out), que permitió el pasaje de las guaraníes a la cita mundialista y obligaban a las argentinas a ir por la heroica ante Brasil. Con el corazón como bandera, tomaron impulso, volaron más alto que nunca y con un contundente 2-0 (17-10 y 18-12) firmaron su pasaporte rumbo a tierras helénicas.
Ahora, ya más aliviadas tras asegurarse su pasaje al mundial, volvieron a medirse ante Brasil, pero esta vez fue por el título. Y nuevamente, siendo como el apodo lo indica, kamikazes, lograron alzarse el trofeo de campeón con un meritorio 2 a 1. El primer set se lo llevó Brasil (17-16) con gol de oro tras igualar en 16. Pero las de Brunati sacaron el amor propio y dieron vuelta el juego. El segundo set fue por 18 a 10 y en los shoot out, las albicelestes triunfaron por 8 a 6 en el último tiro gracias a la atajada de Alma Molina. A propósito de Molina, luego del partido y en declaraciones a Deportv, dijo: “En principio fue un partido difícil. Estoy contenta de sacar la última pelota. Entramos convencidas que queríamos ganar. Dimos todo en el segundo set y por eso lo demostramos”.
Argentina tiene más que futuro en el beach handball. De la mano de Leticia Brunati, los planteles masculino y femenino se clasificaron al próximo mundial de la disciplina, que tendrá lugar en Grecia del 14 al 19 de junio.
