En el partido por el decimoprimer puesto, Argentina cayó 30-26 ante Portugal. El equipo de Giselle Pintos realizó una gran actuación pero se encontró con un sólido conjunto europeo que fue efectivo en los momentos claves para quedarse con el triunfo.
La actuación de Argentina en el Mundial Juvenil Femenino de Macedonia 2014 ya era inolvidable. El equipo de Giselle Pintos tras vencer a Noruega se había asegurado como mínimo igualar la mejor posición en el certamen internacional de la categoría (12° puesto). Luego llegó la derrota ante Croacia y para superar lo logrado en el 2008 había que vencer a Portugal este sábado.
El partido ante las portuguesas inició equilibrado. Sin embargo, tras los primeros buenos minutos, el intercambio de gol desapareció. Argentina se encontró con una arquera portuguesa inspirada, quien le negó las chances de seguir a las europeas de cerca. Así Portugal partió al primer tiempo muerto con un marcador favorable de 7-3. Pero tras el corte, las vestidas de azul mejoraron. Intensificaron el trabajo defensivo para que las rivales vestidas de blanco no se sigan alejando y encontraron los huecos que dejaba la guardameta del oponente. De esta manera, al descanso Portugal se fue arriba 16-13.
En la segunda parte, Argentina rápidamente equilibró el duelo. El equipo dirigido por Pintos salió enfocado en ambos lados de la cancha y tras diez minutos la diferencia era mínima. Allí fue un enfrentamiento de gol a gol pero Argentina empezó a sentir el desgaste y en los últimos diez minutos le costó seguir el ritmo. Las portuguesas rotaron y con piernas frescas tuvieron el impulso necesario para cerrar el juego 30-26.
A pesar de la derrota, las chicas argentinas se pueden retirar con una sonrisa por el excelente certamen hecho. Argentina jugó de igual a igual con casi todos sus rivales y pudo haberse llevado varios encuentros que disputó. Eso es algo que sirve como enseñanza e inspira pensando en que estas jugadoras no son mayores y da el impulso para seguir trabajando a futuro.
