“Este proyecto es algo único”

Carlos Getzelevich, encargado del programa de Buenos Aires 2018, dio detalles de la captación de talentos del ENARD para Buenos Aires 2018. “Son tres ramas: la Evaluación Nacional de Aptitud Física, los chicos federados y los destacados de Juegos Evita”, contó el ex entrenador de la Selección de Vóley, a la vez que confía en los chicos que viajarán a Nanjing: “Argentina va a dar lo mejor”.
Por Micaela Piserchia
Los Juegos Olímpicos de la Juventud de Nanjing 2014 están a la vuelta de la esquina, y, por ende, se convierte en una bomba de tiempo para la organización de los Juegos de Buenos Aires 2018. Además de los planes que refieren a la infraestructura y a los aspectos organizativos, el capital humano es un factor más que importante, ya que ellos serán los que representarán al país y tendrán la oportunidad casi única de hacerlo ante su gente. Carlos Getzelevich es el encargado del programa de Buenos Aires 2018, y quien, básicamente, recorre todo el país en búsqueda de los jóvenes talentos que buscarán llegar a lo más alto dentro de cuatro años, cuando los Juegos Olímpicos de la Juventud sean en Argentina. El ex jugador y técnico de la Selección de Vóley dio detalles acerca de este proceso de reclutamiento de deportistas.
¿Cómo es el proceso de captación del ENARD?
El proceso tiene diferentes aristas, siendo la totalidad el Plan Operativo. Una de ellas es el Plan Nacional de Aptitud Física, que se está llevando a cabo en las 24 provincias del país, que termina el 22 de agosto. Es un censo para los chicos de la clase 2000 y 2001, que tienen diferentes test para que podamos trabajarlo, y, además de las aptitudes que tengan, poder cotejar distintos aspectos que se preguntan en ese cuestionario (que debe ser firmado por los padres y debe llevar sus datos). También se le pregunta al chico por los gustos de los distintos deportes olímpicos que se van a jugar Buenos Aires, y, por orden de preferencia, se anotan en los tres primeros. También sabríamos a través de ese cuestionario si tiene una discapacidad, para poder trabajarlo. Ya llevamos más de 150.000 chicos evaluado y creemos que va a seguir creciendo en este mes que falta. Para llegar a esto capacitamos a 1025 evaluadores que están en todo el país haciendo este trabajo. Luego se pasa a la página del ENARD, se juntan los datos para ser utilizados por la gente de estadística y así sacar conclusiones de la información. En cada caso tenemos 28 coordinadores deportivos que están con los 28 deportes que se van a practicar en los Juegos Olímpicos 2018. El ENARD con cada una de las federaciones acordó un coordinador para llevar a cabo este programa para estos cuatro años y su función es la de poder tener un censo de su deporte en las edades en las que se van a jugar los Juegos de Buenos Aires. Entonces, la importancia de los coordinadores de 2018 es, además de recolectar datos a través del Plan Nacional de Aptitud Física, es el hecho de sumar a los chicos que ya practican los deportes y son destacados en ello. Otro de los canales para llegar a Buenos Aires 2018 es el de los Juegos Evita, que ya están en su fase final, así que son tres ramas: el Plan Nacional, los chicos federados y los destacados de Juegos Evita. En enero y febrero se harán campamentos de 2000 chicos y 2000 chicas, con testeos más sofisticados para involucrarlos en el deporte que tienen más condiciones para practicar.
Luego de la selección en cuestión, ¿ya están estipulados los pasos a seguir?
Sí. La idea es que a partir de marzo de 2015, abrir Centros de Desarrollo Olímpico en todo el país: donde esté el talento, el ENARD tiene pensado mejorar las condiciones de trabajo de los chicos que han sido seleccionados en cada uno de los deportes. Se van a acondicionar los lugares para que los chicos no sufran el desarraigo de irse de su provincia, y, con un técnico con el que tenga clínicas y perfeccionamientos a través del ENARD, el coordinador y otros profesores, los deportistas puedan desarrollarse libremente en su lugar de origen. Está calculado que se abrirán entre 100 y 120 centros en todo el país, cuyo objetivo será brindar las condiciones que hoy en día no se tienen. Entre los coordinadores y profesores se hará un trabajo planificado, paulatino y bien ejecutado desde 2015 hasta 2018. En 2015 la idea es hacer competencias entre los Centros Olímpicos de todo el país y en 2016 hacer que chicos de otros países vengan a competir a Argentina para, en 2017, sí achicar la pirámide y viajar con los más destacados a otras naciones. El foco para 2018 es el cambio de la estructura y también es proyectar, para que, en el caso de que los chicos no lleguen a 2018, puedan alcanzar su punto más alto de 2018 en adelante.
¿Cómo vive esta experiencia habiendo tenido tantos años en el deporte?
Este proyecto es algo único, ya el hecho de pensar en un no desarraigo es algo inédito que me motivó a meterme de lleno. El ENARD ha hecho un trabajo fantástico y agradezco poder ser parte de esto.
¿Cómo ven a los chicos que viajarán a Nanjing?
Desde el ENARD sabemos que cuando uno va a los Juegos Olímpicos de la Juventud no hay medallero y que se trata más de valores culturales y educacionales. Pero tenemos en claro de que Argentina va a dar lo mejor y seguramente tendrán una gran actuación pese a que haya diferencias amplias de acuerdo con los Juegos Olímpicos de los adultos.
¿Qué es lo que percibe de los chicos que se animan a este proyecto?
La verdad es que percibo una energía muy positiva para adoptarlo. Es una iniciativa para crear futuro en los chicos y en el deporte. Creemos que con este programa el desarrollo del deporte va a ser distinto, y si bien hay cosas para mejorar, tanto en los chicos como en los profes, el proyecto ha caído muy bien.