La triatleta Romina Biagioli es un ejemplo de perseverancia y de que hay que continuar aún cuando el cuerpo sufre lesiones complejas. Será olímpica por primera vez.
Una fractura en la costilla es un dolor muy agudo. Quienes la padecen, relatan que inclusive cuesta respirar en la vida cotidiana. La cordobesa Biagioli sufrió una fractura, una fisura y una rotación en sus costillas izquierdas cuando faltaba muy poco para el cierre del ranking olímpico y era imprescindible la sumatoria de puntos.
Se cayó en una competencia y disputó dos más para finalmente en Huatulco confirmar que sería olímpica. La triatleta, de 32 años, será olímpica por primera vez en su carrera y cumplirá el gran sueño.
Fue bronce en el Campeonato Panamericano de Monterrey 2019, conquistó oro en el Campeonato Sudamericano 2019 y ganó la de oro en el Sudamericano de Playa Rosario 2019. Estos son algunos de los logros en cuestión de triunfos, aunque Biagioli demostró que lo más valedero en su carrera deportiva es la perseverancia y la capacidad de continuar.
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La argentina tuvo su origen deportivo en la natación, aunque en su adolescencia se volcó definitivamente al triatlón que tiene además de la natación al ciclismo y el pedestrismo. El debut en la Copa del Mundo de ITU fue hace 10 años, en el 2011.
Biagioli se prepara en México junto con Luciano Taccone, quien además de triatleta destacado de Argentina, quienes son pareja desde los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011.
Mucho más valorable es la clasificación porque la realidad del triatlón en América es muy distinta a la de Europa. Porque Biagioli y Taccone tuvieron competencia porque eran clasificatorias para los Juegos Olímpicos, pero cuando el sistema de clasificación no está vigente, hay dos años en los que solo compiten a nivel de torneos Sudamericanos y Panamericanos.
Es un gran trabajo mantener la forma y el ritmo de competencias de alta exigencia cuando no compiten en copas del mundo o series mundiales. Luego de la participación de Taccone en los Juegos Olímpicos de Río 2016, Romina hizo un clic. Se dio cuenta de que tenía que modificar su preparación por lo que cambió de entrenador e incorporó un psicólogo.
Ser olímpica llevó un camino de esfuerzo y se seguir aún cuando por ejemplo no pudieron viajar a Yokohama. Y, por si la clasificación en el triatlón ya es laboriosa, todo esto se desarrolló en medio de la pandemia.
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Los Biagioli son una familia dedicada al deporte y a representar a la Argentina. Su hermana Cecilia, nadadora, estará en un Juego Olímpico por quinta vez y, su hermano Claudio es el entrenador.
El 27 de julio, Romina Biagioli será la única representante argentina en triatlón.
