Las parejas argentinas ganaron sus partidos de dieciseisavos y octavos de final en Nanjing y se metieron a los cuartos de final. Las chicas triunfaron ante Trinidad y Tobago y Turquía, en ambas ocasiones 2-0, para meterse en dicha instancia. Mientras tanto los chicos superaron 2-0 a Lituania y 2-1 a Francia.
Las duplas argentinas de beach volley dieron que hablar en Nanjing en la etapa de grupos y este domingo lo volvieron a hacer en las instancias de eliminación directa. Es que los dúos nacionales, tanto de hombres como mujeres, superaron los dieciseisavos y octavos de final en la jornada con muy buenas actuaciones.
Por el lado de las chicas, Camila Hiruela Tapia e Irene Verasio no tuvieron grandes complicaciones. Por la mañana superaron fácilmente a Chelsi Ward y Malika Davidson, ambas de Trinidad y Tobago, por 21-13 y 21-13 en veintinueve minutos de juego. Luego superaron por la noche a las turcas Esra Cetin y Selin Yurtsever por 21-9 y 21-18.
De esta manera, han quedado clasificadas para cuartos de final. En la próxima instancia las argentinas enfrentarán a las brasileñas Eduarda Santos Lisboa y Ana Patricia Silva Ramos. Las cariocas llegan al cotejo del lunes tras haber ganado todos sus partidos y no haber perdido ni un set por lo que será un partido muy duro para la pareja nacional.
En cuanto a los chicos, Santiago Aulisi y Leandro Aviero no la tuvieron tan fácil para sortear los partidos de hoy. El primer triunfo fue claro ante los lituanos Matas Navickas y Edvinas Vaskelis por 21-9 y 21-14 en veintinueve minutos. Luego debieron sudar la gota gorda para meterse entre los mejores ocho ya que debieron enfrentar a los franceses Arnaud Gauthier y Arnaud Loiseau. Fue un partido muy parejo y terminó yendo a tiebreak pero los argentinos se impusieron en 48 minutos por 21-11, 21-23 y 15-13.
Los próximos rivales de los argentinos serán los alemanes Eric Stadie y Niklas Rudolf. Los europeos arriban tras ser líderes del Grupo B con puntaje perfecto y haber superado hoy a los austríacos Pristauz-Kratz por 21-18 y 21-15. A lo largo de los seis partidos disputados, los teutones solo perdieron un set.
