Franco Serrano hizo historia en el pentathlon moderno. El joven de 17 años ganó la medalla de plata con su compañera Selma Abdelmaksoud de Egipto y trajo la primera medalla olímpica para el deporte.
Lágrimas, gritos y abrazos. Todo es emoción y confusión, pero solamente algo no lo era: Franco Serrano cruzaba la meta y los argentinos se fundieron en un cálido abrazo. Todos, entrenadores, atletas, voluntarios, dirigentes, padres y público. Fue una gran fiesta porque Franco Serrano con su segundo lugar tras los relevos mixtos internacionales se colgaba la primera medalla olímpica para el pentathlon argentino.
Serrrano pudo acceder a la misma gracias a sus 1156 y a la actuación compartida con su compañera Salma Abdelmaksoud (Egipto), actual campeona olímpica en individuales. En esgrima habían comenzado a competir el viernes y finalizaron terceros con 245 puntos, esta mañana habían sido segundos en natación con 310 puntos y una gran marca de 2m00s31 y sólo quedaba una prueba por delante, el siempre difícil laser run. En el medio consiguieron buenos puntos en el bonus round de esgrima, pero las energías estaban puestas en el tiro-carrera.
A estadio lleno y con una hinchada muy particular, Salma salió a correr y tirar primero para que su compañero Franco lo hiciera después. Con tiros efectivos y buen ritmo de carrera, el de José C.Paz tuvo algunos inconvenientes en la segunda pasada de tiro que hicieron llenar de incertibumbre el estadio. Para colmo se le había acercado el polaco Kaszperczak y eso le agregó picante a la carrera. Pero Serrano no dudó, se concentró y acertó tres tiros al hilo y salió corriendo para completar sus últimos 800 metros. Llegó con lo que pudo, las lágrimas y gritos desde afuera lo mantuvieron en pie y finalmente cruzó segundo la meta (con 599 unidades).
Martina Armanazqui, la otra argentina en competencia, terminó en el 9no lugar con su compañero Alex Vasilianov (Moldavia) juntos habiendo hecho 1100 unidades: 305 en natación, 207 en esgrima y 588 en el laser run.
Una jornada realmente histórica para el pentathlon moderno, que ahora ostenta un subcampeón olímpico entre sus filas.
