Venció en la semifinal jugada en Glasgow, Escocia, por un global de 3 a 2 a Gran Bretaña y se metió en la final en donde se las verá nuevamente de visitante ante Croacia del 25 al 27 de noviembre. En el quinto punto, Leonardo Mayer venció a Daniel Evans por 4-6, 6-2, 6-3 y 6-4.
Parecía que se escapaba al ver que no jugaba Juan Martín del Potro. Sin embargo, en el Emirates Arena de Glasgow, el correntino Leonardo Mayer salió a jugar un quinto punto con los ánimos entrecortados. Esos mismos que estuvieron bien arriba finalizado la primera serie de singles en donde Argentina se fue con una abultada ventaja de 2 a 0 luego de que Delpo venciera en cinco sets al cuco Murray. Luego Pella haría lo propio ante el talento de apenas 21 años Kyle Edmund.
Pero el castillo de naipes que bien se había forjado el viernes comenzó a derrumbarse el sábado con el partido de dobles. Allí, los hermanos Murray (Andy y Jamie) dieron una clase tenística, sobre todo Jamie que viene de ganar dos Grand Slam y es uno de los mejores doblistas del Circuito.
Pese a esto, la paridad estaba a la orden del día cuando salieron a jugar la segunda serie de singles. Guido Pella ni siquiera pudo robarle un set a un alicaído Andy Murray que dio un lindo susto cuando pidió asistencia por unos dolores en una de sus piernas. Pese a esto, Pella no pudo aprovecharse de su situación y terminó perdiendo el match: la serie estaba 2 a 2.
Para Leonardo Mayer la segunda mitad del año fue muy malo: entre lesiones y bajones anímicos, el yacaré correntino no tenía la solvencia que se esperaba. Ante esta adversidad, el capitán del equipo argentino, Daniel Orsanic, lo llamó en reemplazo de Juan Mónaco (en peor situación que él). Vaya reto para Mayer.
Uno se preguntaba por qué no poner a Federico Delbonis que no pisó la cancha solamente para los entrenamientos. Orsanic quería al yacaré peleando el quinto punto, no sólo para ganar, sino también para darle ese empujón anímico que todo tenista siempre necesita y es bienvenido.
Así fue que Mayer jugó de menor a mayor. Perdió el primer set por muy poco, pero luego se repuso ante la (tibia) arremetida de Evans, que no pudo hacer nada ante buenos tiros cruzados y excelentes primeros servicios que se transformaban en aces o en jugadas a dos remates.
Argentina está en una final. Nuevamente como sucedió en cuatro oportunidades, Argentina tendrá la chance una vez más de al fin adjudicarse la Ensaladera de Plata. Esta vez será ante la Croacia de Cilic, Dodic, Draganja y Coric del 25 al 27 de noviembre y otra vez de visitante, como toda la Copa (Polonia, Italia y Gran Bretaña)
