La taekwondista Luciana Angiolillo nos brindó una entrevista previo a lo que será el calendario 2016 para el taekwondo argentino. En plena preparación para los eventos que se avecinan, habló sobre su 2015 y la recuperación de la lesión ligamentaria, su experiencia en los Juegos Olímpicos Universitarios, el crecimiento del deporte en el país, sus inicios y su vida fuera del taekwondo.
Por Agustín Petrillo
¿Cuál es tu balance del 2015?
Fue bastante positivo, lo arranqué rehabilitando y lo terminé peleando en la Gala de Taekwondo en el CeNARD. Además, fui a los Juegos Olímpicos Universitarios en Corea, después quedé tercera en el Argentina Open, estuve en el G1 de Brasil y termine segunda, en el Sudamericano de Perú fui medalla de bronce y participe en la Gala de Taekwondo, entre medio se hizo el Nacional y quedé primera. No tengo mucha competencia en el país, me mido más en el exterior.
¿Cómo fue la experiencia de participar en los Juegos Olímpicos Universitarios?
Se superponía con los Juegos Panamericanos, como no pude ir al clasificatorio porque estaba lesionada y estoy estudiando en la Universidad de La Plata me dijeron si quería tramitar e ir. Fue una experiencia increíble, lo que es la Villa Olímpica. Además, también me perdí el Mundial en marzo. Como no estuve en los dos eventos fui a los Universitarios porque era a nivel mundial. Fueron dos cosas en una porque vi lo que era una Villa Olímpica y competí con atletas de otros países.
¿Qué estas estudiando en la Universidad y cómo es tu vida sumada también al deporte?
Estudio en La Plata el Profesorado de Educación Física. Estoy entre segundo y tercer año. Arranque en el 2013 a estudiar y no la llevo al día, curso dos materias por año o tres. Cuando me lesioné deje completamente y me fui a rehabilitar La voy llevando de a poco a la carrera. Voy a cursar dos o tres veces por semana. Mi prioridad siempre fue el deporte. Mi plan es recibirme a los 26 y estudiar la licenciatura para tener las herramientas cuando me retire.
Después de pasar por una grave lesión ligamentaria ¿qué papel juega la mente en ese momento?
Desde que me lesione hasta que me operé, que pasó un mes, estaba en la ruina. Dude quince minutos porque me di cuenta que mi vida giraba alrededor del taekwondo. Estuve seis meses haciendo rehabilitación.
¿De qué manera diagramaste tu calendario para este año?
El 30 de enero viajamos a Estados Unidos y Canadá. La entrenadora los va a tomar como una suerte de clasificatorio. Van a ser dos plazas tanto masculina como femenina. Alexis Arnoldt ya la aseguró y queda una que la disputamos entre tres chicas entre las cuales estoy yo. La que tenga mejores resultados en los eventos va a ir al Preolímpico. Yo estoy pensando en Río, no sé si voy al Preolímpico pero ya estoy con la mente en los Juegos Olímpicos, uno se va haciendo la película. Somos de categorías distintas pero trato de estar relajada y pelear. Después de los Juegos está el Panamericano pero aspiro a Río, habrá otros torneos que no son objetivos principales pero el objetivo es clasificar.
¿Cómo está planificada la pretemporada?
Tenemos doble turno de entrenamientos, uno a la mañana y otro a la tarde. Después merendamos o descansamos. Hasta el 30 de enero estamos en el CeNARD. Vanina (entrenadora de la Selección) hará una concentración el 17 de febrero, un día después de volver de Estados Unidos, donde vienen países extranjeros a intercambiar luchas.
¿Qué opinas sobre el crecimiento del deporte con la medalla de Crismanich en Londres y las transmisiones por TV?
Es gigante lo que creció y lo puedo ver en mi club. Ahora hay nenas de 10 años que ya tienen nacionales y torneos afuera. Prendes la tele, ves taekwondo y es una locura. Antes se veía todo fútbol ahora se ven un montón de deportes.
¿Cómo fueron tus Inicios en el deporte? ¿Por qué te inclinaste por el Taekwondo?
Arranqué a los 14 años con la competencia pero a los 10 empecé a practicarlo como algo recreativo. Comencé con mi hermano. Mis padres me llevaban de los pelos porque no me gustaba, el futbol siempre me llamó más, no me inclinaba tanto al arte marcial. Un año antes había hecho karate pero tampoco me gustó. Eran 30 nenes y yo. Pasé a ser uno más. Pero a medida que fueron pasando los años quedó uno solo y yo y no dieron más clases. Tuve que cambiar de club y era distinto: la entrenadora era mujer, empecé a competir y me tenían que tironear para sacarme (risas). Se fueron dando muchas circunstancias, entré a la Selección y hoy sigo acá.
¿A qué aspirabas?
Estaban los Juegos Olímpicos del 2008 y me retaban porque era muy tarde. Me dejaban ver solo una pelea. Yo sentía que podía estar. De forma prolija todo se fue dando para que aspire a estar ahí.
¿Cuáles son tus virtudes y defectos?
Un defecto es que soy muy ansiosa y eso me juega muy en contra a la hora de tomar una decisión. Ahora lo estoy controlando y lo trabajo con la psicóloga. Es difícil encontrar una virtud, pienso más en corregir mis defectos
¿Tenes un referente en la disciplina?
Admiro mucho a Lucas Guzman, es un chico que pegó un salto gigante. Lo sigo desde el 2010, tiene muchísima voluntad.
¿Te gusta otro deporte además del Taekwondo?
Me encanta el fútbol, me gusta jugar. Es lo peor verlo desde afuera porque compito mucho y quiero estar ahí adentro. Cuando le dije a mi mamá de hacer fútbol me dijo que era un deporte de varón, fue un poco contradictorio porque después me llevaron a taekwondo (risas). Ahora se están animando mucho más las chicas a hacer deporte.
