El hockey argentino llega a los Juegos Olímpicos en su cumbre. Las Leonas presentarán a un equipo capacitado para ganar el esquivo oro, mientras que Los Leones tienen grandes chances de superar lo hecho en Seúl 1988 y Sídney 2000.
Por Fernando Torok
La edición XXXI de los Juegos Olímpicos modernos pasarán a la historia. Por primera vez en la trayectoria de la máxima cita deportiva, la actividad se desarrollará en territorio sudamericano. Río de Janeiro, una de las principales ciudades de Brasil, será la sede de un evento olímpico que se perfila como el más difundido y retransmitido por los diversos avances tecnológicos post Londres 2012.
Y así como Río 2016 apunta a romper cualquier récord establecido en el pasado, el hockey argentino llega como el deporte con más esperanzas nacionales. El creciente nivel de los últimos años en ambas ramas hace que tanto Leonas como Leones se encuentren en la cumbre de su nivel y con chance de conseguir actuaciones históricas.
En cuanto a las chicas, el objetivo es el oro. Desde Londres 2012, el equipo se quedó con los dos Champions Trophy disputados (Mendoza 2014 y Londres 2016), se consagró en la Liga Mundial 2015, que tuvo su final en Rosario, y consiguió un tercer puesto en el Mundial de La Haya 2014.
Este Juego Olímpico supondrá la última gran prueba para la vigencia de Las Leonas ya que será el certamen más importante a afrontar luego de la salida de Luciana Aymar, autora de los podios en Sídney 2000, Atenas 2004, Beijing 2008 y Londres 2012. Sin embargo, las chicas confían en sí mismas ya que Argentina igualó esa eterna brecha que siempre tuvieron Holanda y Australia, teniendo la mayor posibilidad (al menos en la previa) de conseguir esa esquiva medalla de oro.
Sin Lucha pero con Rebecchi y Barrionuevo como baluartes, el elenco que dirigirá Gabriel Minadeo dejó bien atrás las crisis de otros tiempos para apuntar a la conquista olímpica gracias a un plantel que muestra el excelso nivel de siempre, pero de la mano de jóvenes jugadoras.
Por el lado de los hombres, el momento también es inmejorable. Gracias a un excelentísimo trabajo de Carlos Retegui, Los Leones dan muestras de ser un equipo con crecimiento, seguridad y confianza. El plantel, ya afianzado, viene de pelear de igual a igual con los gigantes del mundo como Alemania, Gran Bretaña e India.
De la mano de Gilardi, Menini, Peillat y Vivaldi, el elenco del Chapa se perfila para hacer la mejor actuación de su historia. Argentina tuvo sus mejores participaciones en Seúl 1988 y Sídney 2000, donde terminó en el octavo puesto. Para igualar esto Los Leones deberán superar una fase de grupos en donde comparten zona con el gran candidato Australia, Gran Bretaña, India, Japón y Estados Unidos. Un cuarto puesto en el Grupo B garantizará al menos igualar lo hecho en las anteriores actuaciones olímpicas. Después del Mundial de La Haya, donde se obtuvo una medalla de bronce, parece posible.
De esta manera, el hockey argentino promete hacer historia en Río 2016. Si los resultados acompañan, los planteles están certeros y la suerte juega del lado nacional, Río 2016 podría ser una página dorada en el libro del deporte.
