Anabella Mendoz, actual campeona del mundo en figuras obligatorias, dialogó con Argentina Amateur acerca ed las expectativas que tiene sobre esta edición mundialista en Novara.
Por Micaela Piserchia
(@micapiserchia)
Algunos piensan que es muy difícil llegar a ser campeón mundial. Por el contrario, en muchos otros el desafío reside en mantener ese puesto; ese objetivo que tanto costó alcanzar. Precisamente ese es el desafío que hoy por hoy enfrenta Anabella Mendoz, quien el año pasado logró tocar el cielo con las manos al consagrarse campeona mundial de figuras obligatorias, después de que durante tres años seguidos lo hiciera su compatriota, Mariángeles Mantuano. En el Mundial de Cali se pudo colgar la medalla de oro y ahora tiene nuevos desafíos para esta nueva edición en Novara, para lo cual sabe que habrá que trabajar mucho: “Las expectativas son muchas…. la idea es mantener el lugar que logré el año pasado, pero las competencias se hacen y nadie tiene el puesto dado de ante mano”.
Anabella define a los bucles como su fuerte al momento de pararse en la intersección de los círculos pintados en la pista (lugar físico en el que se desarrolla la disciplina figuras obligatorias) y también contó en qué estuvo trabajando todo este año para intentar continuar con el reinado en la categoría, que nada tiene que ver con lo patinado. “En lo que más hice hincapié fue en el disfrutar el momento deportivo en el que estoy… costó mucho llegar acá y la verdad lo quiero disfrutar al máximo”, señaló feliz la patinadora de San Lorenzo de Almagro, que espera tener un gran Mundial.
Aunque, para aquellos inmersos en el mundo del patinaje artístico, es de casi público conocimiento que el Mundial de Novara no será fácil. Con Italia como suprema potencia, Argentina deberá hacer un papel impecable para que la localía europea no incline tanto la balanza. Así lo ve Ana: “En el Mundial cualquier cosa puede pasar… (risas). Es el país que más campeones mundiales tiene y esta vez son sede…. eso pesa mucho, pero vamos a tratar de hacer lo mejor posible para dejar nuevamente al país en lo más alto y lo mejor representado”, cerró. La esperanza es premisa.
