Argentina venció a Bulgaria 3-1 y cerró el fin de semana con dos grandes victorias. Los parciales fueron de 25-16, 25-21, 23-25, y 25-19, con un Nicolás Bruno en un superlativo nivel.
Punto final para la aventura en Córdoba. Se superaron las expectativas de público y los jugadores respondieron de la mejor manera en la cancha: luego de la fantástica e histórica victoria ante Brasil, los argentinos vencieron en esta ocasión a Bulgaria por 3-1 con parciales de 3-1 25-16, 25-21, 23-25, y 25-19. Nicolás Bruno se lució con 18 puntos, finalizando como el goleador del encuentro.
Bulgaria comenzó dormido y pecó de cometer muchos errores, aunque durante todo el partido se mantuvo una constante: la gran labor en bloqueo. De Cecco demostró su calidad de armador y se dedicó a poner pelotas precisas en los brazos de Solé, Ramos, Crer y Poglajen que funcionaron como armas ante los búlgaros.
Alexis González tuvo una gran tarea en recepción y defensa, mientras que Nico Bruno aportó mucha solidez al ataque durante varios pasajes del partido. Bulgaria, por su parte, comprometía a los argentinos desde el saque, el cual muchas veces era difícil de recibir.
La dupla Crer-Solé se afianzó y mediante el doble y triple bloqueo, consiguió gran parte de los puntos argentinos, que se llevaron los dos primeros sets. Para el tercero Bulgaria salió mentalizado en revertir la situación y parcialmente lo consiguió, manteniendo la ventaja durante todo el chico pese a la paridad de Argentina, que igualó en 20 y peleó hasta el final.
El último set mostró a Argentina decidida a cerrar el partido, con rallys de pelotas inalcanzables y una serie de aces de De Cecco entre los 16 y 21 puntos, Argentina se acercó a la victoria. Los de Velasco apretaron el acelerador y pese a que Bulgaria se había arrimado, sellaron el triunfo en 25-19.
Sin dudas fue un partido altamente positivo, como también lo fue el fin de semana, que fue de menor a meyor, pero manteniéndose siempre en el buen nivel de juego.
