fbpx
Natación

De olímpicos a ausentes

La CADDA trabaja en la reincorporación en los clavados para tratar las problemáticas que marcaron la historia. La apuesta es Buenos Aires 2018 para empezar el camino de regreso a los más importantes torneos internacionales. 

Argentina, en clavados, pasó de tener representantes olímpicos a la total ausencia en el plano internacional. ¿Cuáles fueron los factores que provocaron esto? A través de la historia los clavadistas nacionales se vieron afectados principalmente por la falta de gimnasios especializados y la imposibilidad de entrenar en agua. Hay que retroceder en el tiempo hasta los Juegos Olímpicos de 1984 para encontrar a Verónica Ribot, quien también estuvo presente en las citas de Seúl 1988 y Barcelona 1992. Ella representaba a Argentina pero vivía en Estados Unidos, donde tenía lo necesario para entrenar y lograr una carrera con tres presencias en el máximo evento deportivo. Paralelamente en juveniles surgían dos nuevas promesas: Mariana y Ariel Montes, quienes fueron campeones, subcampeones sudamericanos y los últimos en llevar la bandera albiceleste a un podio de nivel continental. Posteriormente, la rusa Swetlana Ishkova fue represente nacional en Sídney 2000. Después de ella ningún clavadista argentino alcanzó unos Juegos Olímpicos.

En 1999 fue la última participación nacional en un Sudamericano de mayores con Ariel Montes y Ishkova: el vacío duró hasta la breve aparición de Kevin Caccaviello en 2014. Recién en 2004 se retoman las competencias nacionales entre Capital Federal, Mar del Plata, Córdoba y Salta. Todas debían afrontar un serie de inconvenientes; buscaban soluciones ya sea entrenando sólo en verano o acudiendo a la gimnasia acrobática durante el invierno. La falta de estructuras de piscinas o de gimnasios con cama elástica y fosa de caída segura, impidió que se trabajara de manera anual para desarrollar una proyección, generando incluso que se dejara de competir.

En 2010 la Confederación Argentina de Deportes Acuáticos (CADDA) tomó cartas en el asunto y gestionó tres becas con el fin de reactivar los saltos ornamentales. Argentina regresó al plano internacional con Iván Beinat (cordobés de once años) al Panamericano Juvenil 2011. Al año siguiente volvió a funcionar la escuela marplatense luego de seis años de estar paralizada y se conformó el Comité Técnico Nacional de Saltos Ornamentales (CTNSO) con José Montes, Alicia Mocelli, Gabriel Hausberger, Andrea de Ruvo, Marcelo D’amico y Mariana Montes. Se comenzó a trabajar con Kevin Caccaviello, quien en 2013 participó en los Campeonatos Nacionales de Chile y Perú, fue podio en todas las pruebas en las que compitió y se ganó el derecho a participar en el Sudamericano Juvenil 2015. Pero en el camino se lo envió al Sudamericano de mayores, donde se midió con clavadistas de primer nivel y su mejor resultado fue un séptimo puesto. Su potencial carrera deportiva finalizó en 2015, porque Kevin decidió dejar el deporte por problemas personales.

Artículos Relacionados

Con miras a los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018, la CADDA convocó al Comité Técnico y los clavados son incluidos en el Programa Escuelas de Iniciación en Deportes Especializados (EIDES). En 2016 se realizó un campeonato nacional con el que se confeccionó el ranking con: Mauricio Saravia primer y único postulante, Mateo Pignata, de Córdoba, Santiago Ferrari de Jujuy, Joaquina Zudor y Manuel Iglesias. Los primeros completaron las cuatro plazas que disponía Argentina para el Sudamericano Juvenil de Calí 2017, (a este torneo no se enviaban representantes desde 1991).

Mariana Montes, ex clavadista, medallista sudamericana, profesora y actualmente parte del CTNSO, dialogó con Argentina Amateur y analizó la participación albiceleste en el Sudamericano: “El único que tenía experiencia en competencias era Ferrari pero en gimnasia de trampolín, él y Saravia vencieron a dos rivales, mientras que Zudor y Pignata superaron al último”. Agregó que para el equipo técnico fue “sumamente esperanzador”. Nuevamente la problemática radica en la falta de piletas y gimnasios equipados para saltos ornamentales. Mariana contó que se realizan 35 saltos cuando deberían ser 80 por día de entrenamiento. “De poder cumplir con las planificaciones ideales, nuestros niños tendrían la cantidad de repeticiones por salto que necesitan para obtener la confianza en si mismos y el dominio del salto y lograrían así, una mayor excelencia en sus ejecuciones”, explicó Montes.

Hubo unos primeros pasos para resolver los problemas: a Capital Federal se le permite entrenar durante todo el año en el CeNARD, mientras que Jujuy recibió una ayuda económica durante ocho meses. En tanto Córdoba y Mar del Plata, avanzaron sobre la promoción. Sobre esto Mariana observó: “Solo están faltando elementos específicos en varias de esas escuelas, tanto Córdoba, Mar del Plata, Jujuy y el Cenard no disponen del equipamiento para trabajar correctamente el mediano y alto rendimiento”. Montes también habló sobre el futuro inmediato y las medidas que se tomarán entre la CADDA y el comité. Se solicitó enviar al representante de Buenos Aires 2018 a concentrarse en Colombia y a campeonatos internacionales. En la misma línea política los argentinos tenían otras dos competencias internacionales, pero fueron canceladas por falta de presupuesto.

Se planteó lograr una mayor roce competitivo a nivel nacional, para atender a los potenciales y ayudar a los juveniles en la búsqueda de sponsor. A su vez se continuó con la solicitud a la Secretaría de Deportes que se construyan tres centros de tecnificación equipados. Para que Argentina vuelva a tener presencia en la categoría mayores y que persista será necesario crear una estructura estable de desarrollo. Desde la CADDA y la Secretaria de Deportes deberán fortalecer las bases actuales para apalear los principales inconvenientes que afectaron a la disciplina y escuchar al Comité Técnico que ve con buenos ojos el presente y no pierde las esperanzas de cara al futuro. “Sabemos que no podemos sentarnos a esperar, por lo que seguimos adelante con lo que tenemos; y esperanzados de que vamos por buen camino”, expresó Montes.

Ella aseguró que todas las expectativas están puestas en los Juegos Olímpicos de la Juventud porque: “Será un gran movilizador junto al Programa EIDES para lograr incentivar a niños y jóvenes a participar”. Será cuestión de tiempo, trabajo duro y apoyo institucional para que Argentina vuelva a subirse a un podio, a consagrarse campeón continental, a participar de unos Juegos Olímpicos; pero principalmente establecer las bases de los clavados para lograr una permanencia y un crecimiento en la disciplina.

Volver al botón superior