Continuán las actividades en el Arena Danubio. Se presentaron Federico Grabich, Andrea Berrino y Macarena Ceballos, ninguno logró acceder a semifinales.
El nadador santafesino, Federico Grabich, nadó los 200m libre en el mundial de Budapest, Hungría. Su tiempo fue de 1:47.89 finalizó 26° y subió puesto respecto a cómo había entrado a esta competencia. Quedó a 0.49 de meterse en las semifinales, pero fue un precalentamiento para la prueba de los 100m libre. Allí le tocará defender el bronce, que ganó en Kazán 2015. En aquella ocasión fue tercero en la semifinal con 48.13, en la última instancia era sexto en los primeros 50m con23.02 pero remontó con 25.10 para subirse al último escalón del podio. Esa fue la primera medalla ganada por un argentino en un mundial de pileta corta. Previamente Argentina había obtenido una presea de bronce en aguas abiertas, gracias a las brazadas, de Gabriel Chaillou en el Mundial de Perth de 1998.
Fue el estreno de Andrea Berrino y de Macarena Ceballos. Berrino tuvo un gran nivel desde el Mundial de pileta corta de Windsor 2016 cuando fue semifinalista. Y lo ratificó en 2017 cuando se convirtió en la argentina con más medallas ganadas en un mismo nacional brasileño en el María Lenk. Su primera competencia fue en 100m espalda, finalizó 25° en la general con 1:47.89. Andrea estuvo a 1.18 segundos de su mejor registró personal, tiempo con el que hubiera entrado a semifinales. Por su parte Ceballos tuvo su primera experiencia mundialista en los 100m pecho donde fue 23° con 1:08.34 a sólo 0.91 de pasar las eliminatorias.
Grabich volverá a la acción el miércoles 26 en los 100m libre y el viernes 28 en 50m libre. Berrino lo hará el miércoles y el viernes 29. Macarena tendrá su revancha el jueves en los 200m pecho y el sábado 29. En la próxima jornada Martín Naidich nadará los 800m libre.
Foto: Facebook Federico Grabich
