El representante argentino de paracanotaje, que ya tiene su lugar asegurado en los Juegos Paralímpicos, regresó a los entrenamientos en Olavarría.
Después de cuatro meses de espera, Lucas Díaz Aspiroz volvió a sonreír. Fue cuando volvió a los entrenamientos en Olavarría. “No fue fácil la espera. Aunque me entrené con un simulador de kayak, no es lo mismo. Por suerte me sentí bien en el regreso y ahora apunto a mi principal objetivo que es Tokio 2021”, dijo el nacido en Lamadrid.
Lo mental, está claro, es fundamental. Díaz Aspiroz lo tiene claro. “Durante la cuarentena se me hizo difícil encontrar la motivación. Fue una sensación muy rara. Lo conversé con mi entrenador y buscamos alternativas constantemente”, explicó.
“Sé que todavía falta mucho para Tokio y que es un camino largo. Estoy bien en lo mental, y eso es muy importante”, indicó en Paradeportes Radio, el programa del deporte adaptado, inclusivo y paralímpico argentino.
Así como dejó en claro que su principal objetivo son los Juegos Paralímpicos del próximo año, Díaz Aspiroz también entendió que tenía que renunciar a su cargo en la Dirección de Políticas de Integración para la Discapacidad de Olavarría. Así, entonces, enfocarse únicamente en la preparación.
“Tokio es una bala de plata para mi carrera y voy a dejar todo. Dios dirá cómo va a darse”, sentenció.
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