El seleccionado nacional competirá en Australia, del 31 de Agosto al 7 de Septiembre
Por su participación en competencias fuera del país y un desarrollo institucional sostenido a lo largo del tiempo, Argentina consiguió por primera vez en la historia un cupo dentro de la máxima instancia deportiva de la disciplina. Son 21 países los que se harán presentes en Gold Coast, Australia, en búsqueda de la gloria.
El Ultimate es un deporte de no-contacto, auto arbitrado, jugado con un Frisbee. Dos equipos de siete jugadores compiten en un campo de juego de 100 x 37 mts, que al igual que la cancha rugby, cuenta con dos zonas de anotación en los extremos. El objetivo del juego es, mediante una sucesión de pases, recibir el disco en la zona de anotación rival y así marcar un gol. Existen las categorías masculina, femenina y mixta, siendo esta última la que más presencia tiene en nuestro país y la que nos representará en Australia.
El constante crecimiento del deporte ha posicionado a Argentina como uno de los centros de desarrollo más importantes de Latinoamérica. La disciplina lleva 25 años pisando suelo nacional, y durante la última década varios clubes han competido en instancias internacionales con grandes resultados.
El proceso de preparación para el Mundial tuvo inicio en el 2022, cuando el cuerpo técnico de la Selección organizó entrenamientos mensuales en distintos puntos del país. El objetivo no era solo seleccionar a los mejores jugadores sino también, al ser un deporte relativamente nuevo a nivel federal, conocer potenciales jugadores y fortalecer su desarrollo, mediante una fuerte preparación física y técnica.
El deporte está nucleado por la Asociación de Deportes con Disco Volador de la República Argentina (ADDVRA @ultimateargentina), que a su vez es parte de la World Flying Disc Federation (WFDF), organismo internacional que rige todas las variantes deportivas de disco volador.
A pocos meses de volar, la Selección continúa trabajando de cara a llevar a casi 13 mil kilómetros de distancia un proceso ligado a nuestra identidad nacional, sosteniendo el sueño mundialista sin apoyo económico estatal o privado. Desde el propio equipo auguran “Ojalá sea un antes y un después para nuestro deporte en el país, vamos a dejar a nuestra bandera en lo más alto“.
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