Anabella Mendoz se coronó por tercera vez campeona mundial en la especialidad de figuras obligatorias. Elizabeth Soler terminó en el tercer lugar, al igual que Luis De Mattia en la rama masculina.
Descomunal. Fantástico. Impresionante. Posiblemente no quepan los adjetivos para describir lo que Anabella Mendoz logró. Esta madrugada, la patinadora de San Lorenzo alcanzó su tercer título Mundial tras ganar la categoría de Figuras Obligatorias en los Roller Games de Nanjing. Mendoz se impuso ante la italiana Giada Cavataio (Italia) y a Elizabeth Soler, la argentina que terminó en el tercer puesto. Giselle Soler, en su primer año de senior, culminó muy cerca del podio, en la cuarta posición. Unas posiciones fantásticas que determinan que Argentina es una importante potencia en el ambiente, que se mantiene hace seis años en el primer puesto mundial: de 2012 a 2014 el oro fue de Mariángeles Mantuano y de 2015 hasta hoy el título está en manos de Mendoz.
En lo que tiene que ver con la rama masculina, la alegría llegó de la mano de Luis De Mattia. El santafesino terminó en el tercer lugar de la categoría que ganó el brasileño Felipe Werle y cuyo segundo puesto fue para el italiano Marco Santucci. En cuanto al resto de los argentinos en la categoría, Esteban Bojorge terminó cuarto y Guillermo Marconi quinto.
Este año Argentina no pudo traer medallas en la especialidad de in line, pero sí posicionó cerca a sus patinadores. En la rama femenina, Ivana Nouet se colocó en el cuarto lugar y Lucía Kindebaluc quinta, mientras que entre los hombres, Carlos Urquía terminó sexto y Carlos Urquía séptimo.
