Los argentinos cayeron por 24 a 13 ante los Springboks, y no pudieron repetir el histórico resultado de Francia 2007.
Se luchó, pero no pudo ser. Tras un duro partido, Los Pumas culminaron en el cuarto puesto del Mundial de Rugby, luego de perder por 24 a 13 ante los Springboks sudafricanos. Hoy se puede decir que jugaron su peor partido en todo el Mundial, pero más allá del resultado, fue el broche de oro de una gran competición para los argentinos.
En cuanto al partido, los sudafricanos lo abieron con un Try a los 5′ de la mano de J.P. Pietersen, y la posterior conversión de Andre Pollard. Los Pumas no pudieron abrir el marcador, sino hasta los 41′ del primer tiempo, con la conversión del capitán Nicolás Sánchez, que logró el descuento 16-3. Diez minutos después, nuevamente Nicolás Sánchez volvería a ampliar el marcador argentino con la conversión de un penal, mientras que el único Try argentino llegó recién en el último minuto, de la mano de Juan Pablo Orlandi, y la posterior conversión, cuando no, de Nicolás Sánchez.
Fue bastante difícil para Los Pumas, ya que cometieron muchos errores a la hora de marcar, además de que casi nunca pudieron tener el control total de la ovalada, y avanzaron muy pocos metros, ya que la defensiva sudafricana, prácticamente no les dio oportunidad de acercarse al In-Goal. Como Sudáfrica fue rápido a la hora de abrir el marcador, no tuvo mayores inconvenientes en hacerse con el control del partido.
Sin embargo, y pese a la derrota, los argentinos coronaron una muy buena actuación en todo el campeonato. Supieron hacerle frente a las potencias, y tuvieron triunfos meritorios, que los colocaron en la elite del Rugby Mundial, especialmente gracias a una nueva identidad de juego, forjada no solo por los jugadores sino también por el entrenador Daniel Hourcade.
Ahora el próximo desafío será el Súper Rugby del año que viene. El Rugby argentino tienes nombres y recursos como para poder seguir soñando.
