Que la violencia no sea protagonista
En la previa del partido que definirá al campeón del vóley argentino, UPCN pidió de manera oficial que haya más seguridad en el estadio de Bolívar para evitar incidentes. Esto se da en la parte cúlmine de una serie que hasta el momento tuvo actitudes repudiables de parte de ambas parcialidades.
UPCN emitió este martes un comunicado en el que pide que haya seguridad extra para el partido definitorio del jueves a jugarse en el estadio República de Venezuela de Bolívar. Esto expresa la notificación oficial redactada por el club sanjuanino:
“En virtud de los antecedentes que pesan cada vez que jugó en la ciudad de Bolívar y velando por la integridad de los jugadores de UPCN San Juan Vóley que sufrieron violencia verbal y escupitajos en el estadio República de Venezuela, es que el club manifiesta su gran preocupación de cara al quinto partido de la Final de Liga Argentina. Por eso, sugiere que al menos cuatro escalones detrás de los bancos de suplentes sean liberados de público local y que además haya custodia policial en dicho sector. Es para evitar los incidentes de partidos anteriores, teniendo en cuenta que el estadio República de Venezuela no cuenta con las medidas reglamentarias”.
La serie que se encuentra igualada 2 a 2 contó con un clima tenso desde su inicio. Esto incluyó maltrato de algunos simpatizantes de Bolívar hacia jugadores de UPCN en el segundo partido en el cual el Celeste fue local. Esas agresiones se dieron especialmente hacia el capitán del equipo amarillo, Javier Filardi, ex jugador de las Águilas. Además, ya en San Juan, seguidores del Gremio atacaron el colectivo de hinchas de Bolívar, por lo que la violencia se ha mostrado de parte de ambas parcialidades.
El gran clásico del vóley nacional tiene antecedentes negativos respecto a la violencia ya que por ejemplo en la final de 2016 hubo cruces entre los integrantes de los equipos. Tras el cierre del primer partido de esa definición, el por entonces preparador físico de UPCN Leandro Lardone tuvo una fuerte discusión con Guillermo García, quien en esa temporada formaba parte de Bolívar.
Este clima de tensión es una mala costumbre dentro de los partidos entre estos dos grandes equipos del vóley argentino: en encuentros previos han existido de ambas partes provocaciones y actitudes repudiables. Para el cotejo definitorio del jueves se espera que la seguridad del estadio funcione de manera correcta y que tanto aficionados como jugadores se comporten de forma adecuada para que se pueda disfrutar de un verdadero espectáculo y que quien resulte campeón puede celebrar en paz.