Ciudad de México 1955: el espíritu deportivo crece

Del 12 al 26 de marzo de 1955 se celebraron en Ciudad de México los segundos Juegos Panamericanos. En esta ocasión, Argentina obtuvo menos de la mitad de las medallas obtenidas en los primeros (73 contra 154).
Por Micaela Piserchia
Lo sucedido en Argentina hizo eco en el mundo y para los segundos Juegos Panamericanos, que se realizaron en Ciudad de México, el público incrementó notoriamente; siendo éste el dato más sobresaliente del torneo. Desde el 12 al 26 de marzo se vivió una fiesta de la que más de 100.000 personas fueron testigo de la habilidad de los mejores deportistas del continente a lo largo de los 14 días que duraron los juegos. El campeonato panamericano contó con la presencia de casi 3000 atletas de 22 países (uno más que en Buenos Aires) que se midieron en 20 disciplinas. El escenario por excelencia fue el Estadio Olímpico Universitario, donde se realizaron las ceremonias de apertura, cierre y la mayoría de los deportes.
Estados Unidos fue el amo y señor de los Panamericanos, debido a que se llevó 177 medallas en total (81 oros, 58 platas y 38 bronces) y marcó una diferencia abismal -de más de 100 medallas- con su inmediato perseguidor, Argentina, que cosechó 73 preseas (contrastando completamente con las 154 de la edición anterior). Ese es un dato a tener en cuenta: los Juegos iban tomando importancia y eran tomados con un perfil distinto. El tercer escalón del podio lo ocupó México, que se quedó con 58 medallas. Aunque claro, los mexicanos ganaron en público.
La novedad para estos juegos es que se incorporaron países y también disciplinas: Canadá, Uruguay, Antillas Holandesas, Bahamas, Puerto Rico, República Dominicana y Uruguay tuvieron su bautismo internacional, al igual que el nado sincronizado y el voleibol, que se incorporaron al programa de deportes panamericanos. Asimismo se establecieron récords históricos en salto triple (Da Silva, 16.56mts) y 400mts (Lou Jones, 45.4s).
En cuanto a los argentinos, el básquet se destacó nuevamente por haberle ganado a Estados Unidos 54-53 (primer equipo que lograba hacerlo), pero, al perder con Brasil por 61-57, hubo un triple empate en el primer lugar que se resolvió mediante la sumatoria de puntos. Allí, Estados Unidos primó y se llevó el oro nuevamente para quitarle el sueño a la que sería la Pre-Generación Dorada. El equipo de fútbol dirigido por Ernesto Duchini repitió oro -iba como el campeón defensor- tras vencer a México, Venezuela y Antillas Neerlandesas en un torneo de ida y vuelta, cuyo último partido fue un empate en tres ante los locales. León Genouth, Omar Alberto Longarella y Manuel Varela fueron medallistas en lucha y fueron otros de los deportistas que aportaron a los 73 metales de la suma total de medallas para la delegación argentina.