Goleada en Tokio

Los Pumas le ganaron 54 a 20 a Japón en el inicio de la ventana de noviembre.

En el inicio de la ventana de noviembre, el equipo argentino empezó con algunas dudas y Tamura puso adelante a Japón con un penal después de minutos de juego muy cortado y en el que Los Pumas no agarraban la pelota. De cualquier manera, la sensación era que apenas bajaran un poco las revoluciones la superioridad, que se veía en lo sencillo que les resultaba a los argentinos romper la defensa japonesa, iba a reflejarse en el resultado. Así fue, tackles muy agresivos y la idea de atacar constantemente pusieron las cosas en orden enseguida. Una buena combinación de los backs terminó en try de Moroni, después llegó un penal para cada lado y el partido estaba 8 a 6.

 

A la salida de un line, Landajo encontró un hueco en la defensa y arremetió para servirle el try a Sánchez, el goleador del partido con 29 puntos (dos tries, tres penales y cinco conversiones). Los Pumas se iban al vestuario con un triunfo claro por 21 a 6 pero con algunas deudas. En especial por imprecisiones en ataque que no permitieron concretar la gran cantidad de quiebres que generaron. Es un déficit que se repite, pero que también es consecuencia lógica del tipo de juego que pretende este equipo: mantener la pelota siempre viva, ser punzante y pasarla en el contacto generan errores. La idea es reducirlos, aprender a manejar los momentos, resignar a veces cierto vértigo para controlar más los partidos. No es fácil, las próximas semanas con rivales más duros se verá cuánto han mejorado en este sentido.

 

El segundo tiempo el dominio fue más firme y apareció la contundencia. Tries de Cordero y Moroni pusieron las cosas 35 a 6 y liquidaron el partido. Llegó el descuento japonés desde la potencia del Amanaki Mafi, pero Cordero y Sánchez volvieron a apoyar y después fueron Cubelli, tras una gran jugada de Moyano, y Lemeki los que cerraron el resultado. El apertura y goleador argentino dio su mirada del partido: “El balance es positivo, pudimos ganar por una diferencia bastante amplia y pese a que pensamos que Japón se iba a venir en el final, logramos contenerlos. Más allá de algunas imprecisiones, terminamos disfrutando el partido y muy contentos por el triunfo”.

 

Si bien el nivel del rival ayudó (el pack japonés contaba con cinco debutantes), el scrum mejoró notoriamente, la contundencia y la firmeza y agresividad de la defensa fueron otros puntos altos (los tries japoneses llegaron con el partido resuelto, con el largo noviembre que resta cabe pensar que cierta relajación tuvo que ver). Hourcade, head coach de Los Pumas, tiene claro que hay que seguir trabajando: “Debemos corregir algunas situaciones, estamos forzando jugadas en la definición y eso nos cuesta contra cualquier equipo. Japón ataca mucho pero pudimos contenerlos durante casi todo el partido. Ahora empieza la gira por Europa y ganamos en confianza, pero debemos corregir nuestros errores porque se viene un partido durísimo en Gales”.

 

El capitán Agustín Creevy comparte la mirada: “Gales va a ser otra cosa, pero queremos seguir creciendo y mejorando. Tenemos mucho para trabajar esta semana, nos espera un partido muy difícil en Cardiff”. El próximo sábado será el primero de los tres partidos que definirán el lugar de Los Pumas en el ranking de cara al sorteo del próximo mundial. La derrota de los galeses contra Australia mejoró el panorama pero todo se resolverá en esos tres test matches contra Gales, Escocia e Inglaterra.