Tendrán una chance más
Las chicas argentinas cayeron en las semifinales ante Ecuador por 62-51, y tendrán una última oportunidad para clasificar al FIBA Americas U16. El partido que definirá el tercer puesto será ante Brasil, este sábado a las 17:45.
Foto: Confederación Argentina de Básquetbol.
De la alegría a la tristeza, y viceversa, hay tan sólo un paso, o también un partido. Argentina brilló en la primera fase del Sudamericano Femenino U15 de Aysén, Chile, y fue líder invicta del Grupo B. Pero, este viernes fue sorprendida por Ecuador, escolta del Grupo A, que se impuso por 62-51 para meterse en la final del certamen.
A pesar de la caída, Argentina tendrá una última chance para cumplir el objetivo de decir presente en el FIBA Américas U16 del 2019. Para aprovecharla, deberá ganarle el juego por el tercer puesto a Brasil, que también fue sorprendido por Chile (60-55) tras ser líder invicto del Grupo A. El juego será este sábado a las 17:45.
El primer cuarto inició con sorpresa para el conjunto albiceleste. Argentina no pudo desenvolver su juego a partir de un buen trabajo defensivo del rival, que supo hacer los deberes para incomodar las transiciones ofensivas y generar pérdidas, el punto débil de este seleccionado juvenil. En ataque, sin tener un gran brillo, pero con la efectividad de su lado, Ecuador acertó en la pintura para un parcial de 15-8.
La tónica del juego se mantuvo en el segundo cuarto, aunque el equipo de Laura Cors le encontró una mejor vuelta a la defensa planteada con muchos pases. A pesar de los errores, el conjunto nacional mejoró en ataque, pero siguió por detrás de su rival, que se escapó a un 31-22 a la hora de ir a los vestuarios.
En el inicio de la segunda mitad, el juego se dio parejo, con errores de ambos lados por parte de los dos equipos. Así, se dio un tramo que ayudó a mantener la distancia, lo que favoreció a Ecuador, ya que el tiempo lentamente se iba acabando. Como si todo esto fuese poco, Argentina se desesperó sobre el final del parcial, y su rival aprovechó para golpear con una ráfaga que prácticamente sentenció la historia (47-28).
A partir de la diferencia de 19 puntos, y que tan sólo quedaban diez minutos, Argentina debió salir a la cancha a desplegar una defensa extendida en pos de generar errores cerca del aro rival. En parte, lo consiguió, ya que tuvo su mejor lapso en el encuentro. Sin embargo, cuando las piernas empezaron a cansarse, y el reloj no ayudaba, Ecuador pudo soltarse para lograr el 62-51 definitorio.