A ocho años de ser olímpicos por primera vez
El 24 de octubre quedó señalado en la historia del handball argentino porque con la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Guadalajara, los Gladiadores se convertían en olímpicos por primera vez.
Ese sueño tan preciado y por el que tanto tiempo se había luchado, se hacía realidad: el Seleccionado Adulto Masculino se alzó con la medalla dorada en los Juegos Panamericanos de Guadalajara y consiguió así la clasificación a los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Argentina venció a Brasil por 26-23 y todos los pronósticos quedaban en el olvido. Matías Schulz, Gonzalo Carou, Pablo Portela, Diego Simonet, Andrés Kogovsek, Leandro Querín, Federico Fernández, Sebastián Simonet, Federico Vieyra, Juan Pablo Fernández, Damián Migueles, Agustín Vidal, Federico Pizarro y Cristian Platti fueron los integrantes de la hazaña ante el siempre temido Brasil. Bajo la dirección técnica de Eduardo Gallardo.
Este partido será recordado por siempre porque se jugó con el corazón, dando hasta lo último y sabiendo encontrar la llave cuando el partido parecía que se escurría. Brasil le puso marca personal al joven Diego Simonet, pero ello no fue un impedimento para el argentino. Cuando en un momento el resultado era 2-5, la garra de los dirigidos por Dady Gallardo lo dieron vuelta 6-5 y cerraron el primer tiempo 15-14 con el inolvidable gol de Federico Pizarro de tiro libre directo.
El segundo tiempo comenzó con los Gladiadores que iban al frente y que sacaron un parcial de 4-0. De todas maneras, Brasil continuaba cerca en el tanteador. ¿Cómo se erradicó esto? Con la alta efectividad de Matías Schulz bajo los tres palos y la excelente labor de la defensa que fue al frente en todo momento y supo cerrar los espacios.
Los últimos dos minutos del partido fueron eternos para los Gladiadores que tenía tres goles de ventaja y Brasil continuaba en la búsqueda del descuento. Diego Simonet con cinco goles y Federico Fernández con seis, fueron los máximos anotadores del equipo sumado a Matías Schulz con 22 atajadas.
El camino para la consagración inició con la victoria contra México por 31-16, continuó con el triunfo ante Estados Unidos 36-19 y cerró la primera fase con 28-20 ante República Dominicana. En la semifinal, Argentina venció a 26-25 a Chile y en la final a Brasil 26-23.
Ese fue el renacer del handball en Argentina para que nazcan nuevos clubes, el deporte deje de ser solo algo obligatorio en la escuela y los jóvenes lo elijan para pasar sus días. Los Gladiadores nunca dejaron atrás su pasado y fueron sentando la base para que los más jóvenes se acoplen al equipo y este conjunto de jugadores sea olímpico por tercera vez en apenas unos años.
Foto: Telam.