La esgrimista habló con un medio radial sobre su estadía en Italia en plena pandemia del COVID-19 donde competía por un lugar en Tokio y que decidió bajarse.
“Nos llegó un mensaje de Carolina Mariani, nuestra coordinadora del ENARD, diciendo si habíamos visto las noticias”, comentó María Belén Pérez Maurice sobre cómo fue el comienzo de su regreso a Buenos Aires. Minutos después el Primer Ministro italiano hablaba a sus ciudadanos comunicándoles que a partir de ese momento comenzaba la cuarentena obligatoria producto de la pandemia del COVID-19.
La esgrimista continuó comentando cómo fue su regreso a la Argentina en una videollamada con el programa radial La Licuadora Deportiva. “Eran momentos de incertidumbre porque el torneo que era clasificatorio a Tokio aún no había sido cancelado y yo todavía, por números, no estaba en los Juegos ya que estaba unos puntos por debajo de la canadiense”, comentó la esgrimista.
La situación sobre la pandemia y la incertidumbre de si se iban o no a suspender los Juegos Olímpicos pasaba por la cabeza de Belén y su maestro. El mero hecho de saber que aún no estaba clasificada y que el torneo de Italia estaba suspendido y sumado a que no sabían si el preolímpico también se postergaría, hacían crecer la ansiedad en la espadista.
“Cada atleta recibiendo la noticia de distintas formas: algunos le vino bien a otros no, pero era una locura ir todos los atletas a cada torneo”, comentó Maurice.
Respecto de la suspensión de los Juegos Olímpicos, las sensaciones de Pérez Maurice fueron “de tranquilidad. Es lo que hay. Mucho no me lo cuestioné. Por un lado me agarró mucho cansancio a fin de año y estaba quemada. Por un lado sé que no son vacaciones, pero te da otra perspectiva. Pero en mi cabeza estaba que en julio iba a competir en un Juego Olímpico. Pero me lo tomé con calma”.
