Practicar deporte de forma esporádica o habitualmente pueden generar daños en diferentes partes del cuerpo. Una de los que más puede puede sufrirlo es la espalda.
¿Qué deporte retomar después de lastimarse la espalda? Es una de las decisiones más importantes porque es el soporte esencial. Por ello se debe elegir aquel que no ejerza una tensión superior a la que puede tolerar la espalda.
Los deportes de contacto o en conjunto no serán una buena opción si tuvo una cirugía en más de un nivel de la columna vertebral, si sufre una enfermedad de la columna vertebral más grave en las áreas donde se unen la parte media y baja de ésta, si tuvo una lesión reiterada en el mismo sector de la columna vertebral y si tuvo lesiones de espalda que desembocaron en debilidad muscular o lesión en el nervio.
Será seguro el regreso a practicar deporte cuando: no sienta dolor o este sea leve, el rango de movimiento sea normal, haya recuperado la fuerza muscular necesaria para el deporte que haya elegido y cuando haya retomado la resistencia acorde a la actividad.
La columna vertebral y los huesos de la pelvis de fijan gracias a los grandes músculos del abdomen, muslos y gluteos. Estos son esenciales para estabilizar y proteger la columna durante el entrenamiento. Una de las principales razones de lesión puede ser que estos músculos no están trabajados de la forma necesaria.
Por eso después del correspondiente reposo y tratar los síntomas propios de la lesión deberán ser minuciosamente activados ya que estos estarán más débiles y menos flexibles.
Llevar estos músculos al punto donde soporten bien la columna vertebral se denomina fortalecimiento de los músculos del tronco. Su proveedor y el fisioterapeuta le enseñarán ejercicios para fortalecer estos músculos. Es importante hacer estos ejercicios correctamente para evitar futuras lesiones y fortalecer la espalda.
Foto: Peri Soler
