fbpx
Historia y CuriosidadesSlider

La historia del argentino más joven en los Juegos Olímpicos

Con 13 años, el rosarino Jorge Somlay fue parte del equipo de remo en dos largos con timonel en Roma 1960.

Muchos años antes de la existencia de los Juegos Olímpicos de la Juventud, el sueño de llegar a la máxima cita del deporte mundial estaba reservada para la élite de amateurs y profesionales, que contaran con una buena cantidad de años de experiencia, aunque no resultaba extraño ver a jóvenes menores de 18 años en las competencias.

Ese fue el caso de Jorge Somlay, nacido en el barrio rosarino de Arroyito en 1946 e hijo del presidente de la comisión de Regatas del Río Paraná. Con el agua de los ríos corriendo por sus venas, a sus 11 años comenzó a participar en carreras de regatas gracias al entrenador Mario Robert, quien lo invitó a participar, debido a que los dos timoneles de ese momento ya eran grandes y estaban excedidos de peso.

Un año más tarde se hizo presente en en el Campeonato Sudamericano de Remo en Santa Fe, en la categoría de dos largos con timonel, junto a Osvaldo Cavagnaro y Ricardo González, trío que se quedó con el primer puesto gracias a un tiempo de 9,18 minutos.

En 1959 formó parte de la Delegación Argentina que viajó a Chicago, Estados Unidos para participar de los Juegos Panamericanos, certamen que lo coronó con dos medallas de plata (cuatro largos con timonel y dos largos con timonel) y una de bronce (en ocho largos con timonel). ?

Haciendo valer su temprana experiencia, un año más tarde formó parte de los 100 deportistas albicelestes que representaron al país en los Juegos Olímpicos de Roma 1960. Con apenas 13 años y 358 días, Somlay se convirtió en el deportista argentino de menor edad en haber participado en una competición olímpica.

Compitió en la categoría de dos largos con timonel. ?En la primera, quedó cuarto en la regata inicial en la Serie 2 de la Primera Ronda (solo el primer equipo pasaba a la final, los demás a repechaje). En aquella instancia, Argentina se ubicó tercero en su serie y no logró el acceso a la final, ya que solamente el primero pasaba a la final por las medallas, que terminaron siendo para Alemania, la Unión Soviética y Estados Unidos, respectivamente.

Post Juegos Olímpicos, Somlay se alejó el deporte de alta competencia y se dedicó a finalizar sus estudios secundarios.

Hoy, en su Rosario natal, hay una placa en conmemoración en el Paseo de los Olímpicos.

dav

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Volver al botón superior