Esta semana Netflix estrenó el film sobre el legitimo reclamo del mejor tenista argentino de todos los tiempos: ser reconocido por la ATP como número uno del mundo. La cinta, dirigida por Matías Gueilburt se sitúa en la amplia investigación realizada por el periodista Eduardo Puppo.
Por Julián Haramboure
(@JulianFunky)
Netflix agregó a su catalogo el documental “Vilas: serás lo que debas ser o no serás nada”. La producción, dirigida por Matías Gueilburt, cuenta con un poco más de una hora y media de duración y detalla la ardua investigación del periodista Eduardo Puppo es pos de justicia: Guillermo Vilas fue número uno del mundo y debe ser reconocido como tal por la ATP.
Se trata de un detallista trabajo que tiene un excelente montaje de introducción: es un archivo grabado por el propio jugador en la década del 70´ el que da inicio a un recorrido, el cual continúa con contundentes frases de grandes referentes del deporte como Gabriela Sabatini, Roger Federer, Rafael Nadal, Boris Becker, Bjorn Borg, Rod Laver, entre otros.
Luego de ello el film va a su objetivo central: contar cada momento de la investigación de Puppo, la cual surgió en 2007, luego de que la ATP rechazó por primera vez el pedido de Vilas, y después de que la WTA reconoció que la australiana Evonne Goolagong había encabezado el ranking mundial por dos semanas en 1976.
Además de dejar en claro el total compromiso y dedicación que el periodista tiene con esta causa, a través de mostrar el minucioso trabajo de cálculo para reconstruir los listados de casi toda la década del 70′, el documental se caracteriza por un valioso dinamismo y gran uso del material de archivo.
Sin muchos puntos flacos, la producción es contundente en su idea y servirá como un documento más a la hora de un futuro nuevo reclamo a la ATP: según lo recabado en el estudio de Puppo, el tenista nacido en Mar del Plata fue número uno del mundo durante siete semanas, entre septiembre y octubre de 1975 , y en el inicio de 1976.
Como curiosidad, y debido al extraño sistema del ranking de aquella época, el argentino no encabezó la lista en 1977, temporada en la que más brilló con dos títulos de grand slam ganados y 16 en total, un récord que aún se mantiene. Es quizá en esa parte en donde el documental podría ser más claro en la razones técnicas de por qué Vilas no alcanzó la cima del ranking ese año. Otra de las cuestiones que hubiera resultado interesante tener, y que no están, son las sensaciones de la familia del jugador ante esta situación: ¿Qué opinan? ¿Cómo sienten esa lucha? Si bien hay imágenes exclusivas de Guillermo con sus seres queridos, no hay testimonios.
De todos modos, el documental cumple con creces su idea principal y lejos está de ser sólo un recorrido de los grandes logros deportivos de Vilas, es un viaje hacia los ideales y motivaciones de Willy, sus inicios y sus reconstrucciones personales. Tiene fragmentos en donde la intensidad de la búsqueda resulta entretenida, y fragmentos en donde el producto, con éxito, apela a la emoción.
Foto: Prensa Netflix.