Esta es la historia Edniesha Nicole Curry, la entrenadora de la selección masculina de Islas Vírgenes, primeros rivales de Argentina en la Americup.
Por Sol D’Amato
Edniesha Nicole Curry nació en Oregon, Estados Unidos. Allí, donde nació y se desarrolló el básquet, se fundaron sus sueños por ser jugadora. Luego de su paso universitario en su estado, tuvo la oportunidad de jugar tres temporadas en la WNBA, el torneo más importante del básquet femenino, para Phoenix Mercury.
Ya fuera de la cancha, no se distació del básquet. Su conocimiento y su capacidad de liderazgo la llevaron a romper tabúes por doquier, fue la primera en todo:
Fue la única mujer en el cuerpo técnico de un equipo universitario masculino de la División I cuando se convirtió en asistente en Maine para la temporada 2018-19. “Nunca he puesto una diferencia en eso, si estaba entrenando a hombres o mujeres”, dijo Curry. “Para mí, siempre se ha tratado de estar en el espacio correcto con las personas adecuadas. Y así es literalmente como dije que sí a ser entrenadora de baloncesto masculino”. Ella era maestra de escuela en Atlanta cuando aceptó el trabajo como asistente de Richard Barron en Maine.
El pasado lunes, rompió otro récord, al convertirse en la primera mujer en ser entrenadora principal de una selección masculina en la Americup. “Para mí, esta oportunidad es más grande que el básquet mismo. Existen muchísimas mujeres entrenadoras en todo el mundo que pueden liderar equipos masculinos”, aseguró antes de comenzar la competencia, donde es la entrenadora principal de Islas Vírgenes, el primer rival de Argentina en la competencia.
Previo a su llegada a Islas Vírgenes, también impuso tendencia en la NBA: fue la primera mujer en servir como asistente en la historia de Portland Trail Blazers y actualmente es una de las seis mujeres que entrenan en la competencia.
También es consciente de que, como mujer negra, es un modelo a seguir. Tanto para niñas como para niños: “Siempre le digo a la gente que nunca le pida permiso a nadie, solo sé lo que quieras ser en la vida. Sé dueño de tu historia, sé dueño de tu viaje, y donde sea que termines, terminarás”, dijo Curry. “Mi viaje no es solo ser mentora o ser un modelo a seguir para las niñas, también son los hombres jóvenes con los que tengo la oportunidad de trabajar y ser mentora, y eso es fenomenal”, remató.
Fotos: FIBA/Instagram de Edniesha Curry