Leanna García: “Hay bastantes chances de clasificar al Mundial”
La deportista española dialogó en exclusiva con Argentina Amateur Deporte en la previa del inicio de le temporada 2024/2025 de Bobsleigh, la primera en la que representará a la Roja.
Por: Facundo Osa
Tiene 29 años, nació y vivió toda su vida en Canadá y hasta tiene experiencia representando al país de la Hoja de Maple en Copas América y Copas Europa en la modalidad de Bobsleigh en parejas. Sin embargo, a partir de esta temporada Leanna García competirá bajo la bandera de España luego de conseguir su pasaporte en julio y de manifestarle su deseo de representar a la tierra de su padre a Ander Mirambell, cuatro veces olímpico en Skeleton y director técnico de Bobsleigh y Skeleton de la RFEDH.
El otro cambio importante de cara a la Copa América en Whistler, donde comenzará el camino de la oriunda de Ottawa, es que dará el salto al Monobob, la prueba más joven de Bobsleigh que tuvo su debut olímpico en Beijing 2022 y en la cual aspira a clasificar al Mundial de 2025 en Lake Placid y a los Juegos Olímpicos de Invierno Cortina 2026.
-Naciste y viviste toda tu vida en Canadá, pero la mitad de tu familia es española. ¿Cómo describirías tu identidad? ¿Te sentís española?
-Siempre me sentí conectada con el costado español de mi familia. En lo único en lo que no me siento bien es con el idioma. La mayoría de mi familia nació y vivió la mayor parte de su vida en España. Se mudaron algunos años a Canadá y ahí aprendieron inglés así que cuando los voy a visitar me hablan en inglés. Voy seguido a visitarlos. Amo la cultura, me siento en casa cuando los visito. Me siento en sintonía con mi identidad española, el idioma es la única barrera que tengo.
-¿Es cierto que cuando le escribiste a Ander le dijiste que querías hacer esto pero que lo único que te preocupaba era el idioma?
-Sí (risas)
-Al venir de un pasado en lanzamiento de martillo y de bala, ¿cómo fue el proceso para volcarte al Bobsleigh? Porque hay una frase tuya en la que decís que sentías que el atletismo te había decepcionado.
-Empecé con el lanzamiento de bala y después me sumé al lanzamiento de martillo. También probé con el lanzamiento de disco, pero no conecté tanto como con las otras dos. Entrené duro, le di todo de mí, me cuidé de la mejor manera y e hice todo lo que podía para mejorar. Mi entrenador que estaba en Ottawa se mudó y mi entrenador de la universidad también se mudó así que dejé de tener esos entrenadores que quería y necesitaba. Sentía que no estaba progresando. Sabía que necesitaba hacer algo más, pero empecé a sentir que esto no era para mí.
-Teniendo en cuenta que en Canadá la oferta de deportes de invierno es enorme, ¿por qué el Bobsleigh?
-Un entrenador vino en medio de un entrenamiento de lanzamiento de martillo y me dijo “podés ser una buena bobsledder. Necesitamos chicas que sean fuertes y rápidas. Sos muy baja para dedicarte al martillo y muy grande para ser velocista, entonces por qué no te dedicás al Bobsleigh”. Decidí probar y mi primera vez no fue muy buena, pero me encantó. Empecé a entrenar más y a comprometerme con el deporte y acá estoy.
-Hay un patrón entre la fuerza y el Bobsleigh. Tia Clair pasó de la Halterofilia en Rio 2016 al Bobsleigh en parejas en Beijing 2022. ¿Cómo se eficientiza la fuerza en la prueba en parejas y en el Monobob?
-En la prueba en parejas es importante ser fuerte desde la salida del bloque porque el trineo pesa entre 170 y 190 kilos según qué tan viejo sea, así que tenés que ser fuerte aunque tenés a dos mujeres empujando, así que se mueve mucho más rápido. En el Monobob mi trineo pesa 170 kilos y tengo que empujarlo yo sola. Tenés que ser muy fuerte y poder hacer que tome inercia muy rápido siendo explosiva.
-Asumo que por haber pasado al Monobob el foco estuvo puesto en las habilidades para manejar en este último verano.
-Sí, es muy difícil practicar tu habilidad al volante durante el verano. El año pasado cuando todavía competía para Canadá fui a Austria como breakwoman y me quedé una semana más en el Monobob. Fui a Whistler y pagué el alquiler de un Monobob porque sé que necesito aprender lo más rápido posible todo lo que se pueda. En el verano solo podés ver videos, carreras viejas o ver notas que vamos armando sobre las distintas pistas. Durante el verano estuve aprendiendo las que no conozco para tener un pantallazo antes de competir allí, pero en Whistler voy a ir a 140 km/h y no hay forma de estudiar eso. Tenés que acostumbrarte a esa velocidad.
-Ese era uno de los objetivos de los que habló Ander, conocer todas las pistas de Europa en donde se va a definir la clasificación olímpica porque ya sabés cómo son las de Whistler y Lake Placid. ¿Qué tan bien las conocés?
-A las de Europa las conozco como breakwoman. Sé cómo son los giros, pero solo manejé en la de Innsbruck. Lo más que hice fue buscarlas en internet, armar y estudiar mis notas, hablar con pilotos con experiencia en ellas. Tengo una idea, pero no manejé en ninguna.
-Aunque sea el debut va a ser en Whistler. ¿Qué tan emocionada estás por el inicio de esta temporada?
-Estoy muy entusiasmada y muy nerviosa. Me estoy poniendo mucha presión, pero también sé que es un año de aprendizaje. La primera vez que manejé fue una experiencia hermosa y tengo muchas ganas de hacerlo.
-Es bueno escuchar eso porque Ander en su momento dijo: “cuando la conocí no la estaba pasando bien, no era feliz y recuperarla como persona fue uno de los grandes éxitos de la temporada”. ¿En qué momento de tu vida fue esto?
-Estaba muy frustrada con cómo se dieron los procesos de selección con Team Canadá y con cómo se habían manejado. Teníamos que pagar bastante dinero para estar en el equipo, y este año es incluso peor para los que quedaron. Hice todo lo posible para quedar, pero sentía que había muchos palos en la rueda. Un ejemplo de esto fue en Whistler. Fui una semana antes para entrenar y mejorar haciendo más bajadas con mi compañera y en la primera pasada el marco del trineo se partió a la mitad. Como yo estaba agachada en la parte de atrás no entendía qué estaba pasando porque sentía que no estaba siendo una bajada normal. Cuando nos bajamos chequeamos el trineo y entendimos porque mi piloto no podía doblar correctamente. Tuvimos que enviar el trineo a que lo arreglen y todo el dinero que gasté para ir más tiempo a Whistler pensando que me iba a venir bien lo terminé dedicando a ayudar a otras personas a mover sus trineos. Estuve una semana y media sin poder dedicarme a mi deporte. Estaba haciendo de todo para mejorar y estar en la mejor posición posible y pasaban cosas que estaban fuera de mi alcance que me hacían sentir que no tenía que estar ahí.
-Dijiste “teníamos que pagar bastante dinero”. ¿Cómo era la ayuda financiera para los atletas?
-Teníamos algo llamado Carding que dependía de en qué nivel estabas. Yo ganaba cerca de 800 dólares canadienses solo durante la temporada, por lo que durante nuestro verano no cobraba eso. 800 dólares canadienses son 600 euros y no es mucho. Teníamos un fee de equipo y teníamos que pagar nuestros viajes, la comida, los gastos, así que no cubría casi nada.
-¿Y el equipamiento?
-Eso corría por cuenta de Team Canada porque ya los tenían. Si el piloto quiere un cambio de trineo o de cuchillas corre por cuenta suya así que como breakwoman no tenía ese gasto.
-¿Con qué situación económica te encontraste cuando empezaste a trabajar con la RFEDH?
-Al principio me dijeron que los atletas no reciben apoyo de la federación durante el primer año, por lo que tendría que autofinanciarme. Pero después armé un presupuesto con todo lo que necesitaba para la temporada y ellos mismos se dieron cuenta lo caro que era. En los últimos meses me ayudaron un poco y de cara a Whistler y Park City van a pagar por mi entrenador y por el alquiler del trineo, que es mucho dinero. Generalmente el alquiler está 500 dólares por semana y no sé cuánto puede costar el honorario del entrenador. Después por lo que sé tendría que costearme el tour europeo por mi cuenta y ya pagué 100 dólares para tomar un ferry a Noruega para esa carrera. Creo que mi trineo va a estar cubierto por un sponsor que tenemos.
-Entonces se puede decir que hay chances de que consigas la clasificación olímpica con un trineo alquilado.
-Este año voy a alquilar y el que viene necesito tener uno. Hay varios trineos de alquiler están chocados y usados así que no importa si sos la mejor empujando o manejando, no van a ir rápido. Voy a hacer todo lo posible para comprar uno para la 2025/2026. De momento no va bien, pero estoy trabajando para tener más sponsors y muchos con los que estoy hablando. Mientras más gente escuche mi historia, más posibilidades hay.
-Considerando que es la prueba más joven de todas las del Bobsleigh, ¿se presta para que haya más sorpresas?
-Te diría que las pilotos con más experiencia son las que ganan las carreras, pero no siempre. Hay sorpresas porque el Monobob está estandarizado: todos los países tienen que usar el mismo. En el de parejas hay distintas marcas y las alemanas tienen la mejor trabajando para ellas. Hay otros países que también tienen mejores trineos que otros, por eso el Monobob es más igualitario en ese aspecto. Depende mucho de la experiencia y de qué tan rápido le agarres la mano. Cuando fui a Whistler fue un gran momento, pero veremos cómo me va en una competencia.
-¿Cómo fue el momento de la charla con Erica (Voss) y cómo reaccionó?
-Fue increíble, me apoyó desde el primer momento. Ella y mis entrenadores fueron a los primeros que les hablé sobre competir con otra nacionalidad. Después de nuestra última carrera juntas lloramos porque entendíamos que iba a ser la última vez que íbamos a competir juntas. Me apoyó mucho y es increíble tener gente que se alegra por vos.
-Se viene una temporada mundialista. ¿Qué tan confiada estás de poder clasificar al Mundial?
-Creo que hay bastantes chances. Obviamente voy a ir a la mayor cantidad de carreras porque es la forma de sumar más puntos. Por eso insisto tanto con las donaciones y el CrowdFundMe porque es la manera que tengo de viajar a las carreras y de conseguir más dinero para la federación. Yo creo que lo voy a hacer y Ander cree que lo voy a hacer.
-¿Cómo fue la relación con Ander desde el principio?
-Él es asombroso. Al principio estaba shockeada por los mensajes que me mandaba y por el apoyo que me daba. Estuvo encima de todo averiguando y solucionando cosas. Mientras yo me preocupaba por miles de temas, él me mandaba un mensaje diciendo que ya se estaba encargando de todo porque quería que me dedicara a ser una atleta, a disfrutar y a vivir el momento. No podría haber pedido una persona más comprensiva.
-¿Dónde estabas en los Juegos Olímpicos de 2022?
-Viéndolos en la casa de mis padres. Esa temporada me rompí la fascia plantar y tuve que someterme a varias inyecciones que no me dejaban caminar bien. No sé si hubiese clasificado, pero tampoco sé qué hubiese pasado si eso no pasaba porque me sentía bien en los entrenamientos.
¿Qué hubieras dicho si en ese momento te contaban que podías clasificar a Cortina 2026 en otra prueba y bajo otra bandera?
-No sé. Recuerdo que la primera vez que tuve un problema serio con seguir con Team Canada mi papá me dijo “vos sos española, competí para España”. Y yo no quería escaparme. Probablemente hubiese respondido algo así. Pero ahora que lo pensé mejor no estoy escapando, sino yendo hacia lo que creo que es mejor para mí, para España y para poder involucrar a más mujeres en el deporte.
-¿Seguiste la repercusión que tuvo el anuncio en España?
-Leí la nota de MARCA y me encantó. Me sentí abrumada y empecé a recibir un montón de mensajes en español. Siguieron saliendo más artículos y no estaba acostumbrada a tener mucha atención puesta en mí. Me escondí unos días porque estaba asustada pero ya empecé a leer todos los mensajes y posteos que tenía porque realmente son increíbles y estoy muy agradecida.
-Debe ser una motivación extra para esta temporada.
-Seguro. Agradezco a todas las personas que van a empezar a seguir mis pasos. De igual manera, aunque no tuviese este extra y siguiese siendo yo sola por mi cuenta, estaría igual de motivada porque amo lo que hago, amo este deporte y amo tener la oportunidad de practicarlo.
-Tu costado académico también está vinculado al deporte entre la kinesiología y la nutrición. ¿Qué enfermedad hormonal tenías y cómo pudiste contenerla con lo que estudiaste?
-Yo sufría algo llamado Síndrome de Ovario Poliquístico (PCOS). Nunca conocí a nadie fuera de Estados Unidos y Canadá que lo tuviera así que capaz puede estar relacionado a los alimentos ultra procesados. Muchos doctores me dijeron que iba a tener los síntomas por el resto de mi vida y entre lo que sabía por lo que había estudiado y los objetivos que tenía para mi vida sabía que tenía que llevar a mi cuerpo a un estado óptimo. Después de investigar en profundidad y de trabajar en conjunto con un montón de especialistas logramos revertirlo. Todos mis valores volvieron a la normalidad y ya no tengo esta enfermedad así que eso me motivó a estudiar para ayudar a otras mujeres.
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