Los chicos argentinos volvieron a brillar en un Mundial Sub 18 de 3×3, en esta ocasión en Hungría. Ellos se quedaron con la medalla de plata en el certamen tras caer en la final ante Nueva Zelanda por 20-18. El conjunto ‘Albiceleste’ terminó su participación con siete triunfos y dos derrotas, imponiéndose ante potencias como Estados Unidos y Francia.
Del jueves 4 al domingo 7 de junio se disputó en Hungría la Copa del Mundo Sub 18 3×3, donde Argentina buscó retener la corona obtenida en Jakarta, Indonesia, en 2013. El certamen contó con la participación de 24 seleccionados, divididos en cuatro grupos de seis equipos cada uno.
La ‘Albiceleste’ integró el Grupo D, donde tuvo un paso casi perfecto. El equipo integrado por Jorge Quercetti Carrano, Ignacio Spagnuolo, Martín Ariel Fernández y Christian Boudet se impuso en cuatro de los cinco juegos que disputó. El debut no fue el ideal ya que cayó por 15-13 ante España, pero luego superó a Indonesia (21-6), a Estados Unidos (20-18), a Puerto Rico (21-18) y a Georgia (12-7).
Como el conjunto español fue el líder de su zona, Argentina debió enfrentar a Uruguay en octavos de final, que llegó tras ser tercero en el Grupo A. Más allá que el ‘clásico ríoplatense’ se presentaba como atractivo, los dirigidos por Emilio Gutiérrez no ofrecieron margen error y se impusieron con un contundente 21-9 para llegar a la última jornada de competencia con la chance de retener la corona.
El primer juego del domingo fue complicado para Argentina. Enfrente estuvo la siempre fuerte Lituania y se dio un juego muy físico. Sin embargo, los sudamericanos no perdieron la calma y vencieron por 10-8. Luego finiquitaron su paso a la final tras la reedición de la final del 2013 ante Francia, con un triunfo en esta ocasión por 19-15.
En el juego por el bicampeonato enfrente estuvo Nueva Zelanda, que en la fase anterior venció a España. Los de Oceanía arrancaron mejor y lograron una buena racha de puntos para marcar el ritmo. Sin embargo, el equipo argentino no aflojó e intentó por todos los medios posibles dar vuelta posible. Más allá de la excelentísima entrega de los jóvenes nacionales, el esfuerzo se quedó corto y los vestidos de blanco se consagraron tras el 20-18.
A pesar de la lógica bronca por quedar tan cerca del título, los chicos argentinos se retiraron con la frente bien en alto. El entrenador Emilio Gutiérrez al término de la actuación analizó en el sitio web de la Confederación Argentina de Básquetbol (CABB): “Esto confirma que estamos bien en el 3×3, que vamos por el buen camino. Ojalá nos dejen implementar el 3×3 escolar y podamos conseguir más jugadores para la disciplina”.
