Braian Toledo necesitó de un lanzamiento para meterse en la final de jabalina en Beijing 2015. El argentino registró 83,32 mts y no solo alcanzó la definición mundialista, sino también que estableció un nuevo récord argentino además de asegurar su boleto a Río 2016. El miércoles irá por la final.
Como una escena sacada de una película de ciencia ficción; como si tuviese un brazo biónico que le permite usar un interruptor para medir la fuerza. Así fue la Qualy de Braian Toledo en lanzamiento de jabalina en el Campeonato Mundial de Beijing 2015. El argentino entró al Nido de Pajaros, esperó su momento con el respeto que lo caracteriza y cuando llegó a su momento hizo historia.
Es que en su primer intento no solo se metió en la final, sino que también logró el boleto a Río 2016 y estableció un nuevo récord argentino. La marca fue de 83,32 mts, un lanzamiento para quemar cualquier libro histórico y empezar a escribir uno nuevo con su nombre en primera plana. La distancia no solo le generó felicidad a él, sino también que asombró a todos los chinos presentes en el estadio y a otros competidores de élite en el Grupo A.
Tras su participación, Toledo habló con TyC Sports y fue muy centrado: “Me había frustrado en Toronto 2015 y esto es una revancha. Se lo dedico a tanta gente que está muy feliz por lo que pasó y obviamente me pone feliz a mí”. Además mencionó: “Me faltaba un poco más este tipo de roce. Ahora mi camino va más por Europa y competir contra estos monstruos que van a servir para que mejore”.
El miércoles, a las 8:05 de la mañana, Toledo afrontará la final y buscará meterse en un podio para seguir escribiendo páginas doradas en el atletismo argentino.
