
Luis Scola fue el encargado de llevar la bandera argentina en la inauguración de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. El Maracaná fue festivo y con momentos de abucheos y repudios.
El estadio Maracaná fue escenario de una nueva edición de los Juegos Olímpicos. En la 31º realización de dicho evento la festidad y tecnología brasileña se hicieron presente para dar comienzo al evento mundial.
A las ocho de la noche de Argentina comenzó la Ceremonia con la cuenta regresiva y la posterior vista desde el “14 Bis” de todo Río de Janeiro en homenaje a Albert Durant. A continuación mediante un juego de proyecciones y elásticos se comenzó a contar la historia del país desde la vida de los pueblos nómades del territorio sumado a la llegada de los africanos y portugueses hasta la conversión en metrópolis de la ciudad donde diferentes artistas brasileños actuaron con la música típica y popular como la bossa-nova y el funk. A partir de allí, se inició el desfile de las 207 delegaciones que comenzó por Grecia y culminó con el anfitrión que se extendió por un poco menos de dos horas. A continuación los bailarines realizaron una danza con los semilleros que le habían dado a los deportistas y formaron por primera vez en la historia los cinco anillos de color verde.
A continuación se dio un momento de abucheos en el discurso del Presidente interino de Brasil, Michel Temer que inauguró los Juegos Olímpicos desde el palco del Maracaná.
Todo fue una fiesta comandado por la música festiva y lo multicolor. Quienes se llevaron la mayor ovación de la noche fueron los Atletas Olímpicos Refugiados, cuya delegación está compuesta por seis hombres y cuatro mujeres provenientes de Sudán del Sur, República Democrática del Congo, Etiopía y Siria, quienes de acuerdo a las palabras del titular del COI, Thoma Bach, envía “un mensaje de esperanza”. Y entre un alucinante remolino de colores, la Ceremonia dejó un mensaje de hermandad y conciencia ecológica en una nación que los necesita más que nunca que con el calentamiento global todo está empeorando.
Argentina con 213 deportistas cuyo mismo número fue en Londres 1948 tuvo como abanderado a Luis Scola. El basquetbolista fue quien portó la bandera albiceleste en el cuarto Juego Olímpico del cual es parte. Los atletas argentinos estarán en competencia hasta el 21 de agosto en búsqueda de la presea y cumpliendo el sueño de tantos argentinos que es formar parte de la competencia mas importante del amateurismo.
La euforia, fotografías y alegría de los albicelestes estuvo presente en el desfile de los deportistas argentinos detrás del basquetbolista Scola. Con varios atletas ausentes porque compiten el sábado, los demás disfrutaron del evento que todo deportista quiere vivir. Los deportistas que estuvieron allí y quienes lo vieron por el televisor debido a que compiten al día siguiente no podrán olvidarlo nunca más.
La elegancia en el atuendo argentino con un saco azul y el pantalón color claro desfilaron por el estadio bajo la mirada del Presidente Mauricio Macri y su esposa Juliana Awada quienes se encontraban en el palco de autoridades junto a los demas mandatario y autoridades del Comité Olímpico Internacional, para luego esperar a que las demás delegaciones desfilaran. Sin embargo, al final de la Ceremonia se pudo ver pocos deportistas. Claro, al día siguiente muchos competían y tampoco podían estar parados por cinco horas si su presencia ya no era imprescindible porque luego de que todas las delegaciones hayan desfilado los discursos y más tarde la actuación de Caetano Veloso serían los que se llevarían todas las miradas hasta que se encendiera el pebetero.
Tras la participación de Gilberto Gil, Caetano Veloso y Anita, quienes encabezaron el carnaval entre los asistentes al Maracaná, se despejó la gran incógnita sobre el último relevo de la antorcha olímpica, honor que correspondió a Vanderlei Cordeiro de Lima, quien sufrió un penoso incidente en Atenas 2004 al liderar el maratón hasta el kilómetro 36, donde fue detenido momentáneamente por el ex sacerdote irlandés Cornelius Horan.
El sueño de todos los argentinos comenzó y se extenderá hasta el 21 de agosto cuando el pebetero sea apagado.