Ayer se jugó la primera fecha de las ventanas FIBA que se disputan en Buenos Aires. Argentina superó a Paraguay 93-67. La vuelta de Carlos Delfino, el debut de Néstor Che García y toda la intimidad de un partido con las tribunas llenas de hinchas.
Por Sol D’Amato
Buenos Aires volvió a recibir a las ventanas FIBA y fue el debut de Néstor Che García como entrenador. Argentina logró la victoria ante Paraguay desde el comienzo del juego, con un parcial 8-0 en dos minutos de juego. García, que mantuvo la convocatoria de 17 jugadores para los dos encuentros, rotó el banco rápidamente. Para el cierre de la primera mitad, los 12 que estaban citados para el primer partido ya habían ingresado a la cancha, y con ello el debut de Juan Fernández, Sebastián Orresta y Agustín Barreiro en la mayor.
El primer cuarto se abrió con dos triples para Argentina, con una superioridad en juego y rotación de la pelota. Con partido con una ventaja considerable, García apostó a que todos sus jugadores sumaran minutos de juego. Así, Barreiro logró conquistar 17 puntos desde el banco, en 27 minutos de juego. Pese a algunas pérdidas por 24 segundos y algunas fallas en defensa, el Alma logró llevarse cómodo el primer cuarto 24-19.
En el segundo cuarto, con la segunda unidad albiceleste en la cancha, Paraguay encontró la posibilidad de achicar la ventaja, llegando a estar a cuatro puntos de Argentina. De a poco, García cerró algunos cambios, devolvió a jugadores clave al ruedo y la ventaja se amplió, para ir al descanso largo de la primera fecha de las ventanas FIBA 48-35.
El comienzo de la segunda mitad arrancó con altura: Nicolás Romano, Carlos Delfino y Tayavek Gallizzi reingresaron al campo para darle control al juego debajo del aro paraguayo. Pero así como se logró demorar el ataque paraguayo, éstos pudieron frenar el parcial de más de 20 puntos que venía estableciendo en los cuartos anteriores. El final del tercero dejó un parcial de 19-17 y comenzaron el último chico 67-52.
El último cuarto fue una demostración de juego y talento para un regreso a la selección de uno de los jugadores más importantes de la historia del Alma: Carlos Delfino. El escolta fue la figura del encuentro con 21 puntos, 4 rebotes, 6 asistencias y un robo en 25 minutos. Con 39 años, fue el conductor de un equipo de jóvenes y no tanto con experiencia local, que se encontraron en Obras para sumar una nueva victoria, que suma muchísimo para el próximo mundial 2023. 93-67 marcó el score final, que selló el debut de García como entrenador y sumó un paso más hacia Japón, Tailandia e Indonesia.
Néstor García: “Puedo aportar 33 años de experiencia”
Al finalizar el encuentro, Néstor García y Carlos Delfino tuvieron unos minutos para hablar con la prensa, luego de la primera fecha de las Ventanas FIBA.
“Lo que yo puedo aportar son 33 años de experiencia, viendo distinto básquet y maneras de jugar. El hecho de haber estado en otras selecciones. Estoy conociendo hoy en día tanto talento joven que nosotros tenemos y que hoy lo vimos jugando tan bien en su debut. Lo que pasa cuando se juegan las ventanas es que uno no tiene mucho tiempo para practicar y entrenar, entonces hay que ser muy prácticos en los conceptos. Me parece que hoy el equipo hizo cosas buenas. Las practicidad es algo que vamos a tener que emplear como seleccionadores”, dijo el entrenador.
“Si tengo que ser honesto, estoy viviendo un sueño, porque la verdad no me esperaba volver vivir esto después de 5 años con esta camiseta maravillosa. Vestir la camiseta nacional, jugar con todo este público y viendo toda mi familia en la tribuna. Es sentirme útil. Estoy contento con haber tenido otra oportunidad de poder haber estado adentro de la cancha ayudando al equipo y tratando de darlo todo. Esto es un sueño”, agregó Delfino.
“Ser convocado siempre te da ese mariposeo en la panza, esa ansiedad de estar de vuelta, pero una vez que la pelota empieza a rodar, uno trata de desenchufarse de lo que hay afuera. No es fácil, porque esta camiseta es única, porque es de local, pero es una gran mezcla de sensaciones. Pero estoy agradecido de estar, a esta altura de mi carrera, después de tanto tiempo. A Néstor que se ha fijado en mi, que ha visto Liga Italiana, para poder ayudar al equipo, porque yo siempre fui un jugador de equipo. Jugar con mis compañeros me da las piernas que no tengo. Es muy lindo sentirse útil, competir en este nivel”, sumo el escolta.
“Los partidos perfectos no existen. Hay que ajustar tuercas, ahora vamos a ver los videos y analizar algunas situaciones. Tenemos pensado usar jugadores que no usamos para el próximo partido. Ofensivamente el equipo estuvo muy bien, pero Paraguay es un equipo que se conoce hace bastante y supo moverse bien defensivamente. Siento que se tocaron el balón, y el análisis que hago es muy positivo”, analizó el entrenador sobre el partido y sobre el rival.
“Estar hoy con la selección argentina, con la cancha a full llena, con el público super respetuoso reconociendo todo lo que hacían los jugadores, la verdad que fue muy bonito estar en casa con la gente de local. Que estén de local nos es de mucha más ayuda de lo que se cree”, reflexionó García.
“Cuando tenés un público realmente único, cuando jugás de local, es algo impagable. Cuando jugás en la selección, jugar de local pasa poco así hay que disfrutarlo. Cuando tenés a la gente que te empuja, son un jugador más. Así que, ojalá mañana se repita y le sirva al equipo, nos sirva a todos, que podamos disfrutar y divertirnos todos adentro y afuera de la cancha”, remató Delfino.
Argentina enfrentará hoy nuevamente a Paraguay, 22:10 hs. El entrenador y su cuerpo técnico decidió rotar a los siguientes jugadores: Leandro Vildoza y Franco Baralle serán los nuevos bases, Delfino, Luciano González y Martín Cuello como nuevos escoltas, Marcos Mata, Agustín Barreiro y Martín Fernández como aleros, Nicolás Romano y Juan Fernández como ala pivotes y Taya Gallizi y Lautaro Berra como pivotes.
Fotos: Martín Waichman – AAD