Mastromarino con el bronce y la gloria en sus pies
El maratonista argentino ganó la medalla de bronce en la maratón con tensión casi al final de la carrera cuando fue a saludar a su entrenador.
Mastromarino, quien el año pasado había ganado la maratón de Buenos Aires, hizo historia en este mediodía de sábado en Toronto, porque Argentina estuvo presente en un podio en esta disciplina después de 64 años cuando Delfo Cabrera y Gorno lograron las medallas de oro y plata en los primeros Juegos Panamericanos que se habían realizado en Buenos Aires en 1951. El argentino marcó un tiempo de dos horas, 17 minutos y 45 segundos quedándose con la presea de bronce.
Mariano, de 32 años entre los logros de su carrera cuenta con: compitió en 3000m con obstáculos en los Juegos Panamericanos Guadalajara 2011. Tercer puesto en 3000m con obstáculos en los Juegos Sudamericanos 2014. Tercer puesto en salto con garrocha en el Campeonato Sudamericano 2009 y 2011.
Su entrenador Leonardo Malgor en su Facebook personal publicó: “Quiero que sepan que fue muy duro, que corrio como me gusta que corran mis atletas y que consiguio una medalla increible para todos los que jugamos limpio! Mariano Mastromarino conseguiste la medalla que soñe hace 20 años… Vamos Argentina carajo!!!
A lo largo de la carrera, el argentino estuvo en las posiciones 14, 15, 16, hasta que el paso lo agilizó en los 30 kilómetros de carrera logrando escalar en las posiciones y quedando a 41 segundos del ganador cubano Richer Pérez quien logró el oro en 2:17:04 haciendo su mejor tiempo personal. La medalla de plata fue para el peruano Raúl Pacheco a nueve segundos del cubano y el podio lo completó el argentino Mastromarino a 41 segundos del ganador.
Cuando se acercaba el final de la competencia, Mastromarino creía estar en el cuarto puesto pero ya estaba en ubicación de podio, por lo que se la jugó cuando agarró el terreno llano ya que anteriormente se le había dificultado la competencia por la irregularidad del terreno, pero sobre todo por las altas temperaturas.
El maratonista iba en busca de la clasificación a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro pero no pudo hacerlo porque no llegó a la marca estipulada y se quedó con la medalla de bronce que no era lo principal que iba a buscar Mastromarino.
Esta disciplina es puesta en lo más alto del deporte argentino y panamericano porque Mastromarino, quien tuvo una difícil trayectoria sobre la falta de apoyos económicos, demostró lo mejor de sí aunque llegando a la línea de meta casi se caiga por ir a saludar emocionado a su entrenador Leonardo Malgor. Sin embargo este tropezón no fue caída y pudo cruzar la meta coronándose con la medalla de bronce.