El broche justo para un torneo histórico
Argentina venció a Brasil por 66-59 y se quedó con el tercer puesto del FIBA Americas en Venezuela. Las Gigantes hicieron un excelente partido y terminaron el podio de un torneo que deja una muy linda sensación pensando a futuro. La Albiceleste ganó tres de los cuatro parciales para vencer a un rival que siempre le fue difícil.
Se lo merecían. Si bien la última imagen (contra Cuba) no había sido para nada triste, Las Gigantes hicieron todo lo necesario para ganarse el derecho a retirarse de Edmonton festejando, aún sin la clasificación directa a Río 2016.
Ante Brasil, un rival al cual estuvieron 59 años sin vencer, las chicas se impusieron dos veces en cuatro días y en esta ocasión sirvió para meterse en el tercer puesto del FIBA Americas. Además, la performance y el 66-59 final sirven para ilusionarse con clasificar a los Juegos Olímpicos en el Preolímpico Internacional, que se llevará a cabo en junio del 2016, aún con sede y formato a confirmar -aunque ya se sabe que dará seis plazas-.
A diferencia del partido que definió el primer lugar en el Grupo B, Argentina no tuvo que sufrir tanto para alzarse con la victoria. Esto se dio porque Las Gigantes levantaron aún más su nivel en ambos lados de la cancha para dominar al rival. De hecho, lograron quedarse con los parciales de los primeros tres cuartos (18-13; 12-11; 19-17), mientras que el último fue para las cariocas por la mínima (18-17).
Después de un doble de Justino para las rivales que inauguró el marcador, Argentina logró una racha de 9-0 para empezar a imponer su juego. Siempre con la referencia de Vega en la pintura, las chicas de Santander lograron encontrar los espacios para golpear desde cerca o conseguir huecos en la zona de triples. Complementado con una buena presencia defensiva, las chicas mantuvieron la ventaja.
Al igual que en todo el torneo, un factor clave en el juego argentino fue la inteligencia y mentalidad fuerte para llevar el partido. La segunda decena de minutos mostró un tramo de imprecisiones para ambos equipos, pero las jugadoras mantuvieron la tranquilidad y jugaron a penetrar para forzar faltas. Luego, cobraron de la línea para lograr ir al descanso con un favorable 30-24.
Cuando volvieron a la cancha Brasil dio señales de pelear la historia producto de un buen trabajo defensivo y empezar a meter la pelota dentro del aro. Si bien las cariocas lograron acortar el déficit a cuatro (39-35), Argentina reaccionó y movió la pelota en ataque para encontrar tiradoras abiertas. Con Fiorotto como principal figura, Argentina logró una racha de 10-6 que le permitió ir a la definición arriba 49-41.
Ese carácter de clásico sudamericano se hizo más notorio en la última decena de minutos. El juego no dio respiro en un tramo de rachas. Primero la logró Argentina, nuevamente a partir de quebrar el esquema defensivo rival para entrar a la zona pintada y lograr sumar desde allí. Pero Brasil respondió con la combinación Castro Marques-Justino, que estuvo encendida promediando este último cuarto y que se vio complementado con una buena labor defensiva.
A 2:36 del final la diferencia se redujo a 4 y Argentina encontró la respuesta en dos dobles de Rosset que le dieron aire a su conjunto ante una respuesta de Teixeira Ribero. En el último minuto, nuevamente con la distancia mencionada entre los dos equipos, Melisa Gretter marcó un doble y luego aprovechó los tiros desde la línea para finiquitar otro triunfo importante en la historia del básquet femenino nacional.
Esta es la cuarta vez que Argentina termina en un podio del certamen internacional y la segunda vez que consigue una medalla de bronce (Brasil 2001). Las Gigantes completaron un podio que tuvo al gran local en el puesto más alto y Cuba, el verdugo nacional en semis, como su escolta.