Este domingo finalizaron los Juegos Olímpicos de Río 2016, los 31° juegos en la era moderna y el primero en tierras sudamericanas. Al igual que la ceremonia inaugural, el cierre se dio en el Estadio Maracaná con un escenario repleto, y para iniciar la olimpiada rumbo a Tokio 2020.
Argentina llegó a las tierras brasileñas con una delegación histórica. 213 fueron los atletas nacionales que competieron a lo largo de 17 días en 25 deportes. Esta cantidad fue la segunda más grande de la historia, tan solo por detrás de los 242 representantes en Londres 1948.
Y al igual que en tierras británicas, la delegación Albiceleste tuvo su mayor producción de oros (3). Paula Pareto inició el camino en judo. El sábado 6 de agosto la Peque en la competencia femenina hasta 48 kgs. Tras ser campeona del mundo en 2015, la argentina reivindicó su puesto como la mejor del planeta al dejar en el camino a la rusa Irina Dolgova, la húngara Eva Csernovizcki, la japonesa Ami Kondo y la surcoreana Bokyeong Jeong.
A la para de la Peque, Del Potro empezó a tejer una epopeya en tenis. Después de casi un año de inactividad por lesiones, la Torre de Tandil tuvo su debut frente al gigante Novak Djokovic y venció por 7-6 (4) y 7-6 (2). El enorme triunfo del argentino fue acrecentando la ilusión a medida que fue pasando el torneo. Así se encontró el sábado 13 en semis frente a Rafael Nadal. Luego de perder el primer set 7-5, Delpo volvió a demostrar su primerísimo nivel al remontar con un 6-4 y 7-6 (5) en un partido que duró poco más de 3 horas.
Al día siguiente, domingo 14, fue el momento de la definición frente a Andy Murray. Allí el británico aprovechó el desgaste de su rival para imponerse 7-5, 4-6, 6-2 y 7-5. Más allá que Del Potro no pudo quedarse con el oro, sumo una medalla de plata impensada e histórica porque enfrentó a tres de los cuatro mejores que presenta el circuito ATP (faltó Federer, ausente por lesión). Ahora a ilusionarse con la Copa Davis.
Las últimas dos medallas de oro llegaron en la semana final de competencia. El miércoles 17, la Marina do Gloria vio a los veteranos Cecilia Carranza y Santiago Lange emerger para ser campeones. Los argentinos pelearon contra mareas y situaciones personales (Lange tuvo cáncer de pulmón) para conseguir un más que merecido oro. Así la vela, uno de los deportes donde Argentina más medallas sumó, pudo conseguir su esquivo oro.
En tanto el último gran festejo ocurrió el jueves 18. En Deodoro, el Centro Olímpico de Hockey vio a Los Leones en su mejor momento para conseguir un gran oro. El camino de los dirigidos por Carlos Retegui comenzó con un empate 3-3 frente a la siempre fuerte Holanda y también incluyó en la fase de grupos un 4-4 frente a Alemania. Con récord de dos victorias, dos empates y una caída (India), Argentina sacó boleto a cuartos de finales.
Desde entonces Argentina vivió todo tipo de momentos. En cuartos sufrió más de la cuenta ante una España que la respetó mucho y la Albiceleste terminó festejando un 2-1. En semis el combinado nacional volvió a chocar con Alemania, que hasta ese entonces era vigente bicampeón olímpico, y le dio una clase de juego. Con una efectividad demoledora y un gran trabajo en todas las líneas, el equipo argentino venció 5-2 para meterse en la final frente a Bélgica.
La definición ante el conjunto europeo fue más sufrida de lo esperado. Argentina arrancó perdiendo a los dos minutos, pero se recuperó con buena actividad en las jugadas fijas. Ya arriba 3-1, Bélgica logró acercarse y tener la chance de igualar la historia, pero en una contra sobre el final Agustín Mazilli aportó el grito de desahogo. Medalla de oro impensada, porque se esperaba por parte de Las Leonas (de flojo andar y eliminadas en octavos) y los chicos volvieron a demostrar que son los mejores en 2016.
Los tres oros y las cuatro medallas dejan un lindo gusto de boca. Si bien es la misma cantidad que en Londres 2012, son de un color más valioso (no hubo bronces). Además hubo desempeños para la ilusión pensando en Tokio 2020 (por ejemplo Fernanda Russo, que con 16 años fue 20° en tiro), mientras que también hubo despedidas como la de Emanuel Ginóbili, quien dijo adiós a su actividad con el básquet argentino luego de la eliminación en cuartos a manos de Estados Unidos (que fue campeón).
