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Rugby

Derrota en Cardiff

Los Pumas jugaron un flojo partido y perdieron 24 a 20 con Gales en un test match correspondiente a la ventana de noviembre.
 
En un partido de bajo nivel, muy trabado y con escasos quiebres por parte de los dos equipos, Los Pumas cayeron 24 a 20 frente a Gales. Los jugadores argentinos cometieron quince penales, varios de ellos fueron en el scrum y terminaron en una tarjeta amarilla a Ramiro Herrera, y no lograron generar opciones de ataque (terminaron con sólo tres quiebres y apenas siete pases en el contacto). Parecían dadas las condiciones para festejar una victoria pero en ningún momento el equipo consiguió desarrollar el juego que mostró en los últimos partidos.
 
El primer tiempo terminó con los galeses arriba por 6 a 3 tras dos penales de Leigh Halfpenny y uno de Nicolás Sánchez. Los últimos quince minutos fueron plenos de ataque galés pero la defensa argentina respondió con duros tackles y firmeza en el maul. El scrum no conseguía estabilizarse y el árbitro Angus Gadner castigó a la primera línea argentina. Con el ingreso de Enrique Pieretto, y sumando a Matías Moroni al pack por la amarilla a Herrera, Los Pumas por fin pudieron empujar y consiguieron una infracción a favor tras la que se fueron al descanso.
 
Quedaban casi diez minutos de inferioridad numérica y apenas comenzado el segundo tiempo Gales lo aprovechó y llegó al try en una jugada que requirió del TMO. Liam Williams entró al ingoal a pesar de los tackles y amplió la diferencia. Cinco minutos después, tras un buen arranque y rastrón de Martín Landajo, una de las figuras argentinas, Juan Martín Hernández superó la marca galesa y volvió a dejar a Los Pumas cerca en el marcador. El juego siguió ausente y el tiempo pasaba. Vino otro try galés y pronto otra respuesta puma de la mano de Landajo.
 
Sánchez con un penal puso a Los Pumas a un punto cuando restaban siete minutos pero Halfpenny estiró otra vez la ventaja a tres del final y no quedó tiempo para más. Muchos errores, baja intensidad en ataque y una buena defensa galesa que complicó el contacto trabando varias veces la pelota y haciendo lenta cada oportunidad hicieron que Los Pumas hayan dejado pasar la chance de acomodarse en el ranking. La semana que viene en Escocia deberían ganar para no tener un cierre de año complicado, después toca un partido durísimo con Inglaterra que ganó sus últimos once encuentros (hoy a Sudáfrica, antes tres veces a Australia y antes un seis naciones completo).

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