El ex arquero de los Gladiadores, que volvió del retiro, se consagró campeón de la liga local con el Pfadi Winterthur
En marzo de 2020, Matías Schulz, quizás el arquero más destacado de la historia de los Gladiadores, anunciaba su retiro del handball profesional, tras 14 años de carrera profesional. Sin embargo, poco tiempo después, el “alemán” volvió a la actividad, y vaya si lo hizo de gran manera: consiguió con su equipo, el Pfadi Winterthur, consagrarse campeón de la liga suiza, el único título que le faltaba en el club.
Ya a fines del año pasado, Schulz integró algunas listas de convocados en el Pfadi, equipo para el que jugaba cuando anunció su retiro, y al que siguió ligado luego como ojeador y entrenador de arqueros. De hecho, en diciembre de 2020, había entrado en un partido para atajar 2 penales. Sin embargo, su regreso “formal” a la actividad se dio en marzo de este año, cuando atajó buena parte del partido ante el St Gallen, donde su equipo se impuso por 27-25.
Luego de su regreso en ese encuentro, que fue ya sobre el cierre de la fase regular, empezó a atajar más regularmente, y tuvo protagonismo en la fase final del torneo. Estuvo presente en la serie de cuartos de final, que su equipo ganó por 3-0 sobre el Basel, y en las semifinales, donde, también por 3-0, el Pfadi despachó al Suhr Aarau. Y estuvo también en la serie final, enfrentando al Kadetten Schaffhaussen, equipo que venció al elenco de Schulz en las 3 finales anteriores.
Sin embargo, en esta ocasión, el final de la historia fue diferente, y la cuarta fue la vencida: contundente 3-0 en la serie, con un cerrado 25-23 en el encuentro final, donde el arquero argentino tuvo un 24% de atajadas (incluyendo un penal atajado), que sentenció la consagración del Pfadi. Se cortó la mufa para el equipo de Winterthur, que logró su primer título de liga en 17 años, y también para Matías, que a sus 39 años, logró finalmente ganar el título que tenía pendiente con el club suizo, tras haber obtenido la Copa Suiza en 2017, y la Supercopa en 2018. Un regreso con final feliz, para uno de los máximos referentes del handball argentino.
Foto: Handball Argentina