Ser las hijas de alguien destacado del deporte puede ser algo tedioso o fantástico. En el día de la madre, esta es la historia de Gala Rymberg y Micaela Baccino, deportistas en la que la influencia de sus madres, también deportistas o ligadas fuertemente al deporte, calaron hondo en la inserción en la actividad en la que se desempeñaron.
Por: Sol D´Amato Y Ángeles Vidal
El día de la madre siempre es un buen momento para entender la importancia de la influencia de ellas en la vida de los y las deportistas. Saliendo de la madre que además entrena, este año las protagonistas son ellas, a través de sus hijas.
Mujeres inspiradoras, que desde el ejemplo transmitieron el amor y la pasión por el deporte, y que lograron que eso impacte nada menos que en sus hijas. Maternar ya es sinónimo de esto, pero más aun lo es en estos casos.
Desde competir embarazadas, amantar en plena competencia, promulgar poder llevar a sus hijos o hijas a las concentraciones si están en pleno proceso de lactancia, y demás noticias rodearon el mundo del deporte, en el que más acerca a las mujeres gestantes y a quienes maternan a no dejar el alto rendimiento pese a ello.
“Desde que soy muy chica mi mamá me incentivó a realizar alguna actividad física. El primer deporte que hice fue gimnasia artística a mis 4 años, después hice un tiempo de circo y a los 7 años empecé gimnasia de trampolín. Siempre me cuidó y me acompañó y en cada decisión para que yo esté feliz y haga lo que más me guste, y me enseñó muchas cosas como la perseverancia, responsabilidad y disciplina“. Quien habla es Gala Rymberg, deportista e hija de Karina Oliveira, también gimnasta y fuerte influencia para ella.
“Conociendo su historia deportiva sé que fueron muchas emociones las que sintió cuando empecé a meterme en el ambiente de la gimnasia, del que ella se había alejado por mucho tiempo”, reconoció Gala.
“A partir de mi mamá y de mi papá siempre estuvo la cultura del deporte. Mi mamá cuando era chica era profesora de gimnasia. Mis papás no querían que yo haga gimnasia, preferían otro deporte, pero yo quería hacer gimnasia como mi mamá”. Micaela Baccino también tuvo su infancia envuelta de deporte, y fue sumamente influenciada por el pasado y el presente de su madre, Paula Gergo, quien fue integrante del ENARD.
“Si bien querían que hiciera otro deporte, siempre me apoyaron para hacer gimnasia. Pasé de artística a rítmica. Cuando acompañaba a mi mamá a los entrenamientos siempre me ponía a jugar ahí con ella, hasta participé de algunas galas de fin de año. Después, mi mamá fue mi entrenadora por mucho tiempo, hasta los 11, cuando entré a la selección, porque era difícil separar el reto del entrenamiento de lo que era el reto de ser mi mamá”, rememoró Baccino.
“Cuando tenía 14 años mi mamá dio un paso al costado en la gimnasia para que yo me pudiera desarrollar mejor, porque en todos lados es difícil ser ‘la hija de’ alguien”, agregó y continuó: “Después fui a los Juegos ODESUR, y era medio raro porque mi mamá ya trabajaba en el ENARD y yo estaba ahí, pero siempre separó la figura de madre en esas circunstancias, pero siempre me acompañaron mi mamá y mi papá”.
“Lo que más me llevé de ellos es la pasión que le pusieron al deporte. Yo estudié una carrera que nada que ver y sin embargo sigo ligada al ambiente, porque es lo que más me marcaron mis papás: el amor por el deporte en general”, concluyó Baccino.
Día de la Madre: La importancia del apoyo
“Su influencia fue muy importante para mí porque me sentí siempre acompañada y comprendida con cuestiones deportivas, que muchas veces necesitan de alguien que haya vivido algo parecido para que entienda y pueda aconsejar”, reflexionó Rymberg.
Madres que son ejemplo, que aconsejan, que dan un paso al costado para acompañar los procesos de sus hijas. Hijas que con orgullo siguen los pasos de sus madres, como el caso de Carla Rebecchi, si hablamos de otro ámbito deportivo, que se mostró hace poco con su hija más grande acompañándola en su primer partido de hockey, o como el caso de Magui Aicega, quien acompaña a su hija Indira con quien comparte club: Belgrano Athletic.
Hace un tiempo ya no es más moneda corriente escuchar que ser madre restringe la posibilidad de seguir ligada al alto rendimiento deportivo, pero también son ejemplo, son continuidad, son herencia. Y ellas, sus hijas, son orgullosas “hijas de”…
Foto: Gentileza Karina Oliveira
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