El director general del ENARD habló sobre la situación de las becas para las integrantes del seleccionado femenino de básquetbol. Él expresó que es imposible entregarlas ya que la CABB todavía no presentó a quiénes estarían destinadas.
Mientras la AdC y la CABB trabajan de manera conjunta para concretar el regreso de la Liga Nacional de Básquetbol, el deporte femenino quedó totalmente diezmado. El primer comunicado de la entidad marcó la cancelación de la temporada femenina 2020, sin una fecha clara para su desarrollo. A la par, Fabián Borro, nuevo presidente de la CABB, no dialogó con Leo Costa sobre lo que su trabajo desde la pandemia hasta el final de su contrato, en 2021, mientras que mantuvo constantes llamados con Sergio Hernández para poder ratificar su presencia en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, que serán en agosto del 2021.
En este contexto, el seleccionado femenino tomó la lógica determinación de emitir un comunicado en el que manifiestan el desagrado por la situación. El mismo expresó la falta de cobró de las becas, la “preocupación por el futuro del básquet femenino argentino”, como también se pidió “respeto por la dedicación, el esfuerzo y el trabajo” que siempre se brindó.
Luego del comunicado del martes, este miércoles habló Daniel Jacubovich, director general del ENARD, en 3×3 radio (Uno contra uno radio). El representante máximo de la Entidad Nacional de Alto Rendimiento Deportivo señaló: “El caso se ve agravado por una cuestión. Ante la ausencia de un nuevo proyecto deportivo, con un responsable técnico y un plantel, para el ENARD es imposible otorgar becas. En términos competitivos, la selección, después de la excepcional actuación en la AmeriCup de Buenos Aires, pudo obtener el sudamericano que ya vencía porque ahora se venía un nuevo torneo. Y había que ver qué entrenador, qué jugadoras y qué objetivo deportivo. Eso lo iba a ubicar en un escalón de becas”.
A lo que recalcó: “Las becas no las otorga ni las quita el ENARD. Los solicitantes son las federaciones nacionales. Ya se había vencido el logro deportivo del Sudamericano. Como ocurre en la mayoría de los deportes de conjunto, se sabe que hay siete u ocho apellidos que no van a dejar de estar, pero estas becas no se dan por intuición. Se entregan a partir de una presentación que en este caso quedó acéfalo e incierto por la postergación en la presentación del proyecto deportivo”.
Por último, sobre el comunicado del equipo femenino, subrayó: “Expresa algunas reivindicaciones que me parecen justas ante un estado de desamparo que angustia a las deportistas. Tienen que confiar en un proyecto que todavía no tienen. Ellas no dejan de ser jugadoras, el tiempo va pasando, eso las llevó a un comunicado que expresa desolación. No tiene que haber una diferencia entre la expresión masculina y la femenina de un deporte. No pueden estar en dudas que las condiciones para el entrenamiento, el rendimiento y la preparación tienen que ser igualitarias”.