El Club Daom cerró un año redondo, conquistó todos los títulos a nivel metropolitano y enaltece su jerarquía por doquier. Se ganó el respeto y admiración de sus pares, y deja en claro su estirpe de equipo grande.
Se culmina un año redondo para la institución localizada en el barrio porteño de Flores, es que el Club Daom enmarcó estupendos resultados en una de sus disciplinas más importantes. El equipo principal obtuvo el campeonato de la Liga Metropolitana tras lograr una gran campaña en la fase regular, luego en semifinales dejó en el camino a Ferro y en la final dejó sin nada a Vélez.
Pero no todo termina allí, ya que en las categorías restantes también hubo desempeños sobresalientes que ostentaron títulos de campeón, las divisiones menores lograron consagrarse para abrochar un año fenomenal en el elenco de Bajo Flores. La planificación y una vida dedicada al béisbol son los ejes principales del éxito tricolor en el marco metropolitano.
Las buenas nuevas llegan de la mano del equipo de sóftbol femenino, que en su debut profesional gritó campeón después de vencer a Vélez en la final por 8-2, en un torneo relámpago disputado en el mítico Estadio Nacional construido por el prócer nacional del deporte, Juan Carlos Pena.
No queda duda alguna lo que representa Daom no solo a nivel metropolitano sino nacional, proyectos llevados con eficacia y la buena conducción de quienes trabajan dejan en claro los hechos realizados, y una muestra de contundencia reflejada cada fin de semana cuando el conjunto tricolor sale al campo. Lo más destacado y saliente es la valentía de un cuadro que no se rinde nunca en cualquier circunstancia.