¿Qué trastornos influyen en el dolor cervical?
En los últimos años se ha visto un aumento significativo en el número de pacientes que padecen trastornos temporomandibulares, los cuales inciden en su postura y su cervical. Conocé más.
Según diversas fuentes, 8 de cada 10 pacientes que van al odontólogo tienen bruxismo o disfunción en su articulación temporomandibular.
Las disfunciones temporomandibulares son trastornos musculoesqueléticos que necesitan un esfuerzo multidisciplinario para ser tratados correctamente debido a la variedad de síntomas. Según las teorías actuales, la disfunción temporomandibular se considera asociada con el desequilibrio de todo el cuerpo.
Una de las estructuras de las que más se habla es el sistema estomatognático, el cual es una unidad funcional caracterizada por varios elementos: componentes esqueléticos (maxilar y mandíbula), arcos dentales, tejidos blandos (glándulas salivales, suministros nerviosos y vasculares), y la articulación temporomandibular y los músculos masticatorios (MM). Estos actúan en armonía para realizar diferentes tareas funcionales como hablar, partir los alimentos en trozos pequeños y tragar.
El cuerpo en su conjunto opera según el principio de compensación, cuando se trata de alteraciones en el cuadrante superior, como podría ser un aumento de la tensión muscular; esto conducirá a cambios compensatorios dentro de la tensión muscular en la región cervical para forzar la posición y la postura correcta. Estos cambios adaptativos ocurren en todos los niveles dentro de la tolerancia del cuerpo.
Sin embargo, cuando se excede la capacidad del cuerpo para compensar los cambios patológicos que progresan en áreas determinadas, se establece un desequilibrio que produce síntomas patológicos. Cada persona presenta un límite de compensación propio más allá del cual se desencadenan los síntomas característicos de la disfunción.
Muchos autores señalaron que el dolor en el cuadrante superior y el sistema motor masticatorio puede ser causado por trastornos de la columna cervical y viceversa. Podría explicarse por conexiones funcionales, morfológicas y anatómicas específicas entre la región cervical y temporomandibular.
Dicho señalamiento se ve reflejado en los resultados de diversos estudios en los que se reportan la desaparición total o alivio considerable en síntomas de la columna cervical, así como también dolor y síntomas de la articulación temporomandibular, mientras que la movilidad del cuello la columna también mejoró considerablemente a través de distintos tratamientos.
Para poder lograr ese objetivo existen terapias no invasivas que incluyen fisioterapia, férulas oclusales y técnicas manuales utilizadas para aliviar el dolor en la articulación, los músculos masticatorios, y mejorar el rango de movimiento. Es importante comprender las complejas interrelaciones entre el sistema estomatognático, el dolor y las disfunciones en otras áreas del cuerpo para poder tratar pacientes de manera más eficiente y efectiva en la etapa inicial.
Tanto en este como en post anteriores se explicó sobre la importancia de la salud bucal integrada en el resto del cuerpo debido a sus tantas conexiones.
El equipo interdisciplinario de Jaw Care trabaja en búsqueda de la globalidad y la salud corporal.