Argentina se consagró campeón del mundo de la mano de catorce leones dirigidos por un cuerpo técnico de excelencia encabezado por Diego Giustozzi. En un partido para el infarto venció 5-4 a Rusia con goles de Alan Brandi (2), Alamiro Vaporaki, Leandro Cuzzolino y Constantino Vaporaki. Es el primer título mundial que logra el país en la disciplina.
Haciendo inferiores en el club de barrio, yendo a los entrenamientos de la mano de papá y mamá, mirando a los jugadores de primera con los ojos abiertos y deseando que el tiempo pase para ponerse la camiseta del club. Soñando con luego vestir los colores celestes y blancos, de debutar en la Selección a ser convocado, a ganar un torneo, a vencer a Brasil, a clasificar al Mundial y estar en la cima del mundo.
Durante todo este proceso pasaron los catorce leones que hoy demostraron que si se sueña y por sobre todas las cosas se trabaja, se puede hacer realidad. Hoy Argentina es campeón del mundo de Futsal, en Colombia hicieron historia, son historia pura del deporte argentino.
Pero alguno de estos chicos, los que no tienen la chance de vivir de esta disciplina tan hermosa, hasta tuvieron que pedir días en el laburo para poder viajar y lo han hecho durante toda su vida para poder subsistir y a la par hacer lo que más les gusta.
Hoy Argentina es campeón del mundo y lo es con las atajadas clave de Nicolás Sarmiento, con el temperamento y el talento de Fernando Wilhelm, un capitán con todas las letras, con los robos y salidas de Damián Stazzone y Pablo Taborda, la habilidad de Kiki Vaporaki que pronto estará jugando en Europa, con la eficacia y la pegada de Leandro Cuzzolino, el de los goles importantes, con la zurda y la categoría de Santi Basile, con la capacidad goleadora de Alamiro Vaporaki y Alan Brandi, con Titi Borruto, Maxi Rescia, Gerardo Battistone la importancia de Guido Mosenson y Matías Quevedo desde el banco apoyando en todo momento, todos liderados por Diego Giustozzi y un cuerpo técnico que estuvo en todo momento. Un entrenador que resistió las embestidas de quienes hasta querían imponer jugadores por sobre otros. Y el tiempo le dio la razón.
Desde los ODESUR 2014, con aquella medalla plateada que no paran los éxitos, que no paran de soñar. Llegaron finales en todos los torneos que le siguieron, victorias a Brasil, que de ser un cuco pasó a ser un rival más. La clasificación en las eliminatorias con mucho sufrimiento luego de haberse coronado campeones de América unos meses antes. Los amistosos previos al Mundial, los entrenamientos en Colombia y una fase de grupos con un debut perfecto, una goleada a Islas Salomón y el sufrimiento ante Costa Rica tras ir perdiendo 2-0 a igualar en dos y evitar la otra llave de la Copa en donde estaban Brasil y España, únicos campeones del mundo hasta hoy.
Una victoria infartante ante Ucrania en tiempo suplementario y dos goleadas sin fisuras ante Egipto y Porugal para acceder a la gran final frente a Rusia, que venía de dejar afuera a España con goleada 6-2, esa España que le había robado la chance de ser campeón de Europa a principios de este año.
En una final digna de dos equipos que pusieron toda la carne al asador, Argentina fue el mejor. Los primeros minutos se vivieron con mucho nerviosismo. El conjunto de Giustozzi tuvo a un Sarmiento impecable, Rusia intentó con sus brasileros y un Eder Lima que era imparable de espaldas y enganchando para sacar el latigazo de zurda.
Así llegó la apertura del marcador a cinco minutos para el cierre del primer tiempo. Eder Lima fue quien consiguió romper con el cero. Pero Argentina reaccionó rápido y en segundos, Alamiro Vaporaki convirtió el empate tras un pase de Rescia que capturó un rebote del arquero ante un remate de Borruto. La albiceleste se fue arriba al descanso gracias al tanto de Leandro Cuzzolino de doble penal.
Al minuto del complemento, Rusia igualó de la mano de Eder Lima pero otra vez fue clave el gol a los pocos segundos, esta vez gracias a Alan Brandi. Otra vez el jugador del Benfica puso arriba a Argentina en solo dos minutos del segundo tiempo para el 4-2.
Los minutos pasaron, ambos equipos se cargaron de faltas con mucho por jugar y Argentina tuvo un doble penal. Cuzzolino se hizo cargo pero esta vez el arquero ruso ganó el mano a mano. Rusia dispuso de arquero jugador pero como pasó con Kazajistán, esta vez Kiki, el hermano de Alamiro, aprovechó que no había arquero para que todos se fundan en un mismo grito de gol, el país entero.
Rusia consiguió dos descuentos seguidos y aún restaban veinte segundos en el reloj, una eternidad para el deporte. Argentina se defendió con brillantes defensas de Stazzone y Taborda durante todo el encuentro y finalmente gritó campeón del mundo.
Este título es de todos los que creyeron en este equipo y en el proyecto de Giustozzi desde el 2014, de todos los jugadores que fueron convocados y que aportaron su grano de arena para que esta copa se haga realidad.
Argentina es por primera vez campeón del mundo ¡SALUD CAMPEONES!
